El régimen de Daniel Ortega, a través de la Asamblea Nacional, prepara la cancelación de otras 25 organizaciones no gubernamentales, entre las que figuran la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) y la Coordinadora Nicaragüense de Organismos No Gubernamentales que Trabajan con la Niñez y Adolescencia (Codeni).
De acuerdo a la iniciativa, con fecha del seis de abril y publicada este lunes por la Asamblea, entre la exposición de motivos del decreto enviado por el diputado Filiberto Rodríguez, que preside la Comisión de Paz, Defensa, Gobernación y Derechos Humanos, estas organizaciones no reportaron sus informes financieros conforme los períodos fiscales y desgloses detallados según lo establece la ley.
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Organizaciones opositoras y civiles conmemoraron este día el cuarto aniversario del inicio de las protestas sociales en el país, las que fueron reprimidas por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, dejando una estela de heridos y más de 300 muertos. A la fecha, se contabilizan 181 presos políticos y más de cien mil exiliados, mientras el país continúa inmerso en una crisis política y socio económica.
Los opositores en el exilio prepararon una Jornada Global que ha incluido misas, plantones, visitas a Embajadas y conversatorios en diferentes partes del mundo.
La Unión Democrática Renovadora (Unamos) y la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD) coincidieron en su demanda de justicia para las víctimas y libertad para los encarcelados políticos.
Manifestaron, por aparte, que es oportuno «recordar que los ideales de la lucha cívica por una Nicaragua en democracia y libertad siguen en pie» y que «la lucha del pueblo seguirá teniendo vigencia (porque) la historia demuestra que los nicaragüenses no pueden acostumbrarse a vivir en la opresión».
La portavoz del régimen, Rosario Murillo, declaró ese día que la «soberanía del país no se discute» y, por el contrario, se defiende «a través de las armas, de sabiduría y serenidad de espíritu», dijo luego. Remarcó que «abril» es un mes de victorias y paz.
La represión gubernamental aumentó en los últimos días, a las puertas del cuarto aniversario de la Rebelión de Abril. El Colectivo de Derechos Humanos denunció el asedio policial en contra de Carlos Pavón, padre de Richard Pavón, asesinado el 19 de abril de 2018, en Tipitapa.
Los oficiales se apostaron desde las 8 de la mañana en las afueras de su vivienda. También, el movimiento Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua (PCIN) denunció este lunes que al menos cuatro periodistas y dos medios de comunicación sufrieron asedio policial.
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La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) se solidarizó este día con las víctimas de la represión y los presos políticos de Nicaragua.
A través de su cuenta en Twitter, la oficina a cargo de Michelle Bachelet denunció las condiciones inhumanas en las que se encuentran las personas arbitrariamente detenidas, así como el impedimento de vivir en libertad y ejercer derechos en el país.
La ONU, que recién aprobó un mecanismo para investigar las violaciones de derechos humanos en Nicaragua, también le recordó al régimen de Ortega que «la impunidad no es para siempre».
El rapero y exreo político Luis Miguel Esteban Lesage dedicó una canción a la banda musical Monroy & Surmenage, cuyo vocalista, Josué Monroy, se encuentra detenido desde el 12 de abril por motivos desconocidos.
Semanas antes del arresto, Monroy habría interpretado en público su canción titulada «En el ojo del huracán» que hace referencia a las protestas sociales; por lo que Luis Lesage, conocido como «el rapero místico», decidió escribir, desde el exilio, una canción homónima, en solidaridad con los artistas.
Este día, también se conoció que el régimen expulsó del país al productor musical nicaragüense-costarricense Leonardo Canales, detenido desde la semana pasada. El espacio cultural La Antesala, que era dirigida por Canales, informó que el joven fue deportado y el proyecto fue cerrado.