El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo compartió el 30 de diciembre un “mensaje de paz” para los nicaragüenses al concluir el 2019; año que para la pareja de dictadores ha sido “de grandes esfuerzos y logros”. En la misiva, se lee que el “Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional” agradece a Dios por la confianza que llena los corazones de fortaleza según ellos “para continuar labrando los fértiles campos de nuestros hogares, familias y comunidades, cultivando y cosechando cariño, armonía, reconciliación, paz con dignidad y bienestar para todos”.
La tiranía deja de un lado la crisis sociopolítica que atraviesa el país, que ha dejado más de 325 nicaragüenses asesinados, más de 70 mil exiliados, 65 presos políticos que permanecen secuestrados en los calabozos y centenares de ciudadanos sin empleo. Pero en su mensaje insiste con la frase de “siempre más allá con el formidable aliento de todos los nicaragüenses que amamos a Nicaragua y que queremos Patria, Paz y Porvenir”.
El mayor en retiro del Ejército Popular Sandinista Luis Adolfo Torres Romero, de 59 años, denunció el asedio, amenazas de muerte y agresión a su casa por parte de fanáticos del régimen de Daniel Ortega, quienes la madrugada de este martes, 31 de diciembre, escribieron “plomo” en la pared de su vivienda, ubicada en el barrio Santa Teresita, en Matagalpa.
La nueva víctima de la dictadura se define como opositor del régimen dese hace 20 años y asegura que esta ruptura con las filas del Frente Sandinista se debe al pacto que hizo Daniel Ortega con Arnoldo Alemán.
El documento eclesial se emite solo horas antes de la realización de la peregrinación con el Santísimo que realizará la Iglesia desde el colegio Cristo Rey a Catedral Metropolitana de Managua. @israeldej94 #Artículo66 #DerechoAInformarhttps://t.co/lYJjLqjGlG
— Artículo 66 (@Articulo66Nica) December 31, 2019
A pocas horas de culminar el 2019, la Iglesia católica nicaragüense volvió a insistir que el país necesita “un cambio de rumbo” y un “retorno a la institucionalidad” a la vez que remarcó que si bien durante toda la historia de la nación han existido regímenes totalitarios de distinto signo ideológico, el pueblo posee un arraigo de cultura democrática. La Iglesia reafirma en este documento que como institución insta a la participación en la vida política de todos los ciudadanos del país; así como la importancia de la población para articularse alrededor del “desafío” que puede representar un proceso electoral libre y transparente.
La vicepresidenta y primera dama, Rosario Murillo sancionada por el Departamento de Estados Unidos, desde enero a diciembre 2019, ha destilado y difundido su rosario de insultos contra la oposición nicaragüense. La vocera del gobierno, en sus alocuciones de mediodía a través de su propaganda oficialista, lanzó sus epítetos contra los ciudadanos a quienes en primera instancia catalogo como “vándalos”, “delincuentes”, “terroristas”.
Murillo a 15 días de finalizar el 2019, nuevamente volvió a la carga para agregar una nueva palabra al rosario de ofensas contra la oposición, esta vez, los llamó “rapiñas del imperio” y “sicarios imperialistas” a quienes además acusó de ser los responsables de que Nicaragua “no sea un país pobre, sino empobrecido” ya que según ella la oposición nacional e internacional quiere saquear el país y arrebatar los derechos a un pueblo humilde y trabajador.