La Unión de Presos y Presas Políticas de Nicaragua (UPPN) y el Grupo de Reflexión de Excarcelados Políticos (GREX) denunciaron la grave situación que vive la opositora Eveling Susana Guillén Cepeda dentro de la prisión del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Según el GREX, Guillén ha sido torturada, mantenida en aislamiento, sin agua potable y sin atención médica.
«Desde la Unión de Presas y Presos Políticos Nicaragüense nos sumamos a la denuncia y al llamado urgente del Grupo de Reflexión de de Excarcelados Políticos (GREX) para proteger la vida de Eveling Susana Guillén Cepeda, presa política en grave peligro dentro del Sistema Penitenciario de Nicaragua», refiere el pronunciamiento.
Guillén Cepeda, de 53 años, participó activamente en las manifestaciones antigubernamentales de 2018. Fue detenida por la policía y agredida sexualmente antes de ser liberada, denuncian las organizaciones. A raíz del trauma de su detención, la opositora sufre de depresión por lo que fue internada en un hospital psiquiátrico presentando cuadros de ansiedad, alucinaciones y síntomas de esquizofrenia, no denunció por temor pues eran oficiales.
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La opositora fue arrestada por la Policía orteguista el 5 de agosto de 2023, luego de marchar durante una actividad religiosa con la fotografía de monseñor Rolando Álvarez, acusada de ciberdelitos, menoscabo a la integridad nacional y traición a la patria, por lo que enfrentó un juicio sin garantías y jamás se presentaron pruebas de la acusación.
Cepeda en condición grave
Según los organismos, Guillén Cepeda sufre de un impacto devastador en su salud física y mental , además de presentar un deterioro en su estado emocional derivado de la privación de su libertad y encierro total dentro de la cárcel. Según testimonios de suw excompañeras reclusas, Eveling permanecía sola en una celda con grilletes en pies y manos.
Durante el destierro de los 135 presos políticos enviados a Guatemala por el régimen el 5 de septiembre de 2023, la presa política presentó un cuadro de ansiedad, por lo que se negó a abordar el avión y fue regresada a las celdas de la dictadura tras ser medicada por una oficial de la Policía.
El pronunciamiento afirma que Guillén se encuentra actualmente aislada en una celda «llena de zancudos, en temperaturas extremas, sin acceso a luz ni agua potable», por lo que consideran su caso como extremo en gravedad y exigen la liberación inmediata.
Asimismo, llaman a otras organizaciones y a la comunidad internacional a sumarse a la denuncia de este caso para presionar por su pronta liberación.
Guillén Cepeda es madre de cuatro hijos con los que no ha tenido contacto desde su detención.