Durante la solemnidad de Nuestra Señora de La Merced, celebrada en la Catedral de Matagalpa, monseñor Carlos Enrique Herrera, obispo de la Diócesis de Jinotega y presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), resaltó que están orando por monseñor Rolando Álvarez, quien acumula más de 13 meses como reo de conciencia del régimen orteguista.
«En nombre también de los hermanos obispos de la Conferencia estamos siempre orando por ustedes, por monseñor Rolando (Álvarez); siempre unidos en la oración», dijo el jerarca católico, el domingo, 24 de septiembre, en la celebración eucarística en honor a la Virgen de la Merced, patrona de la Diócesis de Matagalpa.
Monseñor Herrera también subrayó que «(estamos) siempre esperando lo mejor. Lo que Dios quiera, pero siempre orando con la esperanza de que el futuro será mejor para todos nosotros».
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El pronunciamiento del monseñor Herrera, se da bajo un contexto donde la mayoría de los obispos nicaragüenses y miembros de la Iglesia católica guardan silencio sobre el encarcelamiento arbitrario contra monseñor Rolando Álvarez.
El líder religioso permanece encerrado en la cárcel «La Modelo», en Tipitapa, desde el pasado nueve de febrero, fecha en que se negó a ser desterrado, junto a otros 222 exreos políticos, hacia Estados Unidos. Este lunes, 25 de septiembre, el obispo cumple 417 días como reo de conciencia.
La única visita que ha recibido monseñor Álvarez fue el sábado, 25 de marzo, cuando la dictadura de Ortega Murillo permitió la visita de sus dos hermanos y lo exhibió en fotografías y vídeos a través de sus medios de propaganda. Desde esa fecha, se desconoce en qué condiciones se encuentra el prelado.
El obispo de Matagalpa es una de las voces más críticas contra la dictadura de Ortega y Murillo, el binomio que controla los hilos del poder en Nicaragua, un país sumido en una crisis sociopolítica, económica y de derechos humanos desde 2018.
