El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo el jueves que los combates que se prolongan desde hace semanas en Sudán “deben terminar” y autorizó posibles nuevas sanciones contra los responsables del baño de sangre.
“La violencia en Sudán es una tragedia y una traición a la clara demanda del pueblo sudanés de un gobierno civil y una transición a la democracia”, afirmó en un comunicado. Eso “debe terminar”, remarcó.
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