Facunda Ríos, de 80 años, originaria del barrio Santa Isabel, en el departamento de Boaco, fue encontrada muerta en su vivienda, hecho que señalan podría reportarse como una nueva víctima de femicidio.
Una fuente periodística reveló a Artículo 66 que el crimen ocurrió la madrugada del domingo, cinco de marzo. El cuerpo de Ríos fue encontrado en la sala de su vivienda.
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El principal sospechoso es su hijo primogénito, de nombre Alberto Flores Ríos, de aproximadamente 58 años, a quien señalan de ser alcohólico y de visitar con frecuencia a la anciana quien vivía sola.
Existen dos versiones extraoficiales sobre el crimen. Indican que pudo ser asesinada con un arma blanca y otros aducen que el presunto asesino le quitó la vida con un objeto de madera.
Vecinos denunciaron que el hijo de la anciana salió en horas de la madruga y abordó un taxi, con rumbo a la entrada de la comunidad Las Lagunas carretera a Muy Muy o carretera a la subasta.
«La Policía anda haciendo sus respectivas investigaciones, anduvo indagando cerca donde el taxista fue a dejar al hijo de la víctima, pero aún no han dado con el paradero del sospechoso», señaló una fuente.
Se ha conocido que la familia de la adulta mayor es empresaria ganadera de Boaco, quien es conocida como los «Colindres», sin embargo no han querido dar declaraciones al respecto.
Octava víctima en Nicaragua
Con el femicidio de Facunda Ríos, la lista de víctimas de violencia machista se extiende a ocho en lo que va del 2023 —cinco en enero y tres en febrero, solo en Nicaragua, según la organización feminista Católicas por el Derecho a Decidir.
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La organización destaca que en el extranjero han habido otros ocho femicidios, para un total de 16. Los autores de los crímenes han sido en su mayoría parejas, exparejas o parientes cercanos de las víctimas.
«Van 16 femicidios en los tres primeros meses del año, dejando luto en las familias nicaragüenses (…) Es por eso que decimos que el femicidio es peor que la pandemia (del COVID-19), porque con la pandemia se toman medidas para prevenir, pero en el femicidio no se toman medidas ni se realizan campañas para disminuir esa cultura machista de los agresores ante la vida de las mujeres», señaló una defensora de derechos humanos.
Ante esta ola de femicidio, la fuente recomendó a las mujeres víctimas de violencia a denunciar y estar alertas ante cualquier indicio de agresión. «Que busque ayuda con un familiar cercano, ya sea una mujer o una defensora que en cada territorio existe en Nicaragua, porque no están solas», remarcó.
Además, exhortó al gobierno de Nicaragua a prestar mayor atención a los casos de violencia hacia la mujer, porque «las aperturas de las comisarías no nos están dando los resultados favorables porque lo que necesitamos no es estructuras, sino que las mismas tengan un personal especializado y que cumplan de acuerdo a la Ley 779 para darle el seguimiento a todas las mujeres, porque el objetivo principal de la ley es resguardar las vidas de las mujeres», subrayó la fuente.