La crisis de abril de 2018 ha cambiado la vida de la población nicaragüense de formas inesperadas. La situación orilló a miles de familias a abandonar el país por su seguridad y en la búsqueda de un futuro mejor. La familia Lorío es una de las 355 familias que vio morir a uno de sus integrantes por la cruenta represión de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Ahora, están en Miami, Estados Unidos, en busca de asilo político por ser perseguidos del régimen de Managua. Nelson Lorío, su esposa e hija llegaron a una nación desconocida para protegerse de la persecución y atraviesan dificultades para conseguir empleo. El ciudadano lanzó un SOS en su cuenta de Twitter.
Nelson Lorío es el padre de Teyler, el niño que fue asesinado cuando tenía 14 meses de nacido tras recibir un disparo en la cabeza cuando su padre lo cargaba en brazos de camino a casa de la abuela del pequeño. El suceso ocurrió en Las Américas 1, el 23 de junio de 2018, cuando los nicaragüenses celebran el Día del Padre.
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«Dios bendiga este día y sea él haciendo llegar este tweet a la persona indicada ya que humildemente pido lo compartan para poder encontrar un trabajo aquí en Miami o fuera y seguir siendo el sustento de mi hogar», expuso Nelson Lorío en su cuenta de la red social Twitter.
«Llevo casi tres semanas sin trabajo y estoy sumamente preocupado ya que también tengo otra situación con mi esposa quien se encuentra en una silla de ruedas esperando una operación, sin ella no podría volver a caminar. Solo pido que compartas el tweet y obtener información de trabajo humildemente», añadió.
Nelson Lorío llegó a Estados Unidos junto a su esposa Karina Navarrete y su hija de 10 años el 25 de noviembre de 2021, hace más de un año. Estuvieron retenidos por 13 días en un centro familiar en Texas.
Tras su segunda salida de Nicaragua —la primera en agosto de 2018—, Lorío Sandoval dijo a Artículo 66 que su decisión se debía «al acoso, asedio, amenazas y la falta de justicia dentro del país».
Indicó que la arremetida de la dictadura en su contra se originó luego del arresto del que fue víctima el 20 de abril de este año y a la segunda detención se dio contra el líder campesino y preso político Medardo Mairena, actual rehén del régimen de Ortega.