El régimen de Daniel Ortega ha desatado su represión en contra de artistas nicaragüenses, obligándolos al exilio, desterrándolos de su país y aplicándoles restricciones migratorias. El artista Luis Miguel Lesage denuncia que Ortega arremete contra ellos porque «son la voz que llega a la ciudadanía a través de la música, somos nosotros quienes llevamos el mensaje», dijo en entrevista con Artículo 66.
«Creo que es una total cobardía lo que está haciendo el régimen, tratar de callar las voces, tratar de callar a los artistas y expulsarlos del país después de haberlos tenido presos o mejor dicho secuestrados. Pueden expulsarnos y encarcelarnos, pero el mensaje siempre va a estar llegando», refirió el artista nicaragüense exiliado en Estados Unidos.
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El vocalista de la banda de rock alternativo Monroy & Surmenage, así como Salvador Espinoza y Xóchilt Tapia, gerentes de la productora musical Saxo Producciones, que se encontraban detenidos desde el 12 de abril pasado fueron forzados a abandonar Nicaragua. En este contexto también se deportó a la artista italiana Emilia Arienti y al productor musical Leonardo Canales, de nacionalidad nicaragüense-costarricense, y quien dirigía el espacio La Antesala.
«Nosotros loas artistas tenemos un compromiso moral con nuestra patria y eso significa decir a través de nuestro arte lo que está pasando, expresar libremente nuestros pensamientos, nuestros ideales y creo que (Ortega) tiene miedo porque sabe que nosotros los artistas somos quienes llevábamos los mensajes y las voces», refirió Lesage quien compuso una canción titulada «En el ojo del huracán», dedicada a los artistas obligados al destierro.
Expresa que el régimen los ha «desterrado y expulsado de nuestro sitio, nuestro lugar donde nacimos, pero eso no significa que nosotros no vamos a seguir alzando nuestras voces en contra de las injusticias que se están cometiendo en Nicaragua; y desde donde estemos siempre vamos a seguir alzando nuestras voces y diciendo las verdades que a ellos les duele, porque tenemos un compromiso moral con la población de no apagar la llama de abril y no abandonar nuestra lucha».
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Juristas y organizaciones de derechos humanos han denunciado que las expulsiones de Tapia y Espinoza son ilegales. «Las categorías o condición jurídica migratoria de rechazo, la deportación o expulsión de nuestro territorio no es aplicable a los nicaragüenses y en caso de nacionalidad adquirida, tampoco procede sin el estricto cumplimiento de nuestra Constitución Política, instrumentos internacionales de derechos humanos y la Ley General de Migración y Extranjería», denuncia Wendy Flores directora del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más.
Los productores musicales Salvador Espinoza y Xóchitl Tapia, dueños de Saxo Producciones, decidieron exiliarse en Alemania después que el régimen de Daniel Ortega los expulsara del país sin ninguna justificación, son los únicos que han hecho público su lugar de asilo hasta estar seguros.
Lesage afirma que los Ortega-Murillo «quieren acaparar el arte, quieren acaparar a los artistas. Yo no soy un artista de un partido político, yo soy un artista del pueblo y eso obviamente es un golpe para la dictadura, por lo tanto no podemos expresarnos libremente en las calles y no podemos hacer nuestras actividades porque ellos temen que podamos hacer algo contra ellos, saben que somos un poder que movemos masa a través de la música y por eso nos quieren apagar».
