El aumento del 11 % de la canasta básica en Nicaragua en el último año será un impacto para los bolsillos de los ciudadanos, en especial, para aquellos que devengan el salario mínimo o viven del comercio informal. El incremento podría generar más hambre debido a que la cesta familiar supera los 16,000 mil córdobas.
El economista Enrique Sáenz, en comunicación con Artículo 66, explicó que lo primero a considerar respecto al costo de la canasta básica es cuánto se ha elevado en 12 meses, el que superó los 1,700 córdobas de subida en un año; según los datos oficiales del Instituto Nacional de Información de Desarrollo (Inide).
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«Esto significa que un trabajador de la economía formal o de la informal que no recibió un ajuste salarial equivalente a 1,729.04 córdobas, la cifra se traduce en hambre, sobre todo para quienes ganan el salario mínimo, pero hay que considerar que la mayor parte de la población gana menos del salario mínimo porque está en la economía informal, o sea, que la situación es más grave», indicó el especialista.
El salario mínimo en Nicaragua apenas alcanza los 6,590.83 córdobas, lo que implica que los nicaragüenses necesitan devengar casi tres salarios mínimos para tener lo justo y garantizar los productos que contiene la cesta familiar, que tiene un valor de 16,255.38 córdobas.
Sáenz resaltó que el componente de la canasta básica que más se ha encarecido son los alimentos, de acuerdo con los cifras presentadas por Inide. La comida «ha aumentado en un 15 %, eso significa que un trabajador o un pensionado que gasta casi la totalidad de sus ingresos en alimentos, sino tuvo un ajuste del 15 % en sus ingresos, eso significa menos frijoles, menos arroz, menos queso, o menos tortilla en su mesa», manifestó.
«El aumento de la canasta básica, principalmente el aumento del componente de comida de la canasta básica, se traduce en más hambre para las familias nicaragüenses», puntualizó.
Nicaragua, entre los países que padecen más hambre
Según los datos de Inide, los alimentos básicos como el arroz, frijoles, azúcar; carnes, lácteos y huevos, cereales y perecederos llegan a 11,096.45 mil córdobas, es decir 1,414.89 córdobas más que en diciembre 2020 (9,681.56 córdobas).
Enrique Sáenz alegó que existen especialistas que argumentan que el costo de la canasta básica puede ser mayor a los datos presentados por el gobierno de Daniel Ortega, pero asumiendo que esas cifras fueran creíbles los nicaragüenses estarían padeciendo de hambre.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en su más reciente informe sobre la seguridad alimentaria en los países de América Latina y el Caribe posicionó a Nicaragua entre los tres países de la región donde la gente pasa más hambre. La nación centroamericana solo fue superada por Haití y Venezuela.
El escrito refleja que dos de cada 10 nicaragüenses tienen dificultades para tener sus tres tiempos de comida, una situación que ha venido en aumento a raíz de la crisis política. Indican que entre el 2018 y el 2020; el 19.3 % de la población nicaragüense enfrentó dificultades para obtener los alimentos.
Nicaragua tiene la tercera tasa más alta de niveles de subalimentación de la región después de Haití con 46.8 % y Venezuela con el 27.4 %.
