El juez Wilfredo Gabriel Ramírez Lacayo declaró culpables a los presos políticos Yorling Alberto Robles Carballo, de 20 años, y Óscar Enrique Amador Acuña, de 40, originarios del municipio de Catarina, del departamento de Masaya. A los ciudadanos les achacan los supuestos delitos de tráfico de estupefaciente psicotrópicos y otras sustancias controladas y por fabricación, trafico, tenencia y uso de armas restringidas, sustancias o artefactos explosivos.
Según el abogado Julio Montenegro, el fiscal Luis Mongalo solicitó en la audiencia que celebró el 16 de marzo la pena máxima de 23 años de prisión más 1,300 días multa. El defensor dijo a Artículo 66 que apelará una vez se conozca la sentencia.
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Montenegro explicó que en los elementos de pruebas presentados por la Fiscalía hubo cuestionamientos por parte de la defensa, porque hubo contradicciones entre los testigos, que correspondían a policías. «Los oficiales presentaron contradicciones notables, porque dicen que al momento de la detención hubo un tumulto de más de 40 personas, pero cuando yo entrevisté a los testigos de descargo, afirmaron que donde habitaban mis defendidos es una zona rural y cada casa está ubicada a unos 500 metros y que apenas habitan en esa zona entre ocho a 10 personas, no pudo haber un tumulto de 40 personas».
Aseguran ser inocentes
Contrario a las declaraciones de los oficiales de la Policía orteguista, Montenegro expresó que los familiares de los dos presos políticos de Catarina denunciaron que la madrugada del 27 de agosto de 2020, agentes de la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía llegaron con violencia y sin orden judicial a las viviendas de los acusados y que los sacaron por la fuerza bajo la excusa que iban a proceso investigativo, pero que «en ningún momento se ocupó drogas o artefactos explosivos».
«Habían suficientes elementos para que el juez declara no culpabilidad por una duda razonable, porque siempre en materia penal se interpreta favorable al acusado, pero el juez Tercero del Distrito Penal de Juicio de Managua (Wilfredo Gabriel Ramírez) estimó que eran responsables por delitos que mis defendido afirman que no los cometieron», agregó el abogado defensor de derechos humanos.
Julio Montenegro informó que tanto Yorling Alberto Robles Carballo como Óscar Enrique Amador Acuña se declararon inocentes y afirmaron estas acciones son represalias por estar en desacuerdo con el régimen de Daniel Ortega. «De acuerdo con el testimonio de Yorling Robles, (su detención) se debe a su participación en las marchas en contra del gobierno; en el caso de Óscar Amador, manifestó que hace cuatro años se dedicó a la fabricación de fuegos pirotécnicos y ahora se le señala que fabricó explosivos que explotaban en Masaya».
Ambos ciudadanos están detenidos en el Sistema Penitenciario Jorge Navarro, en Tipitapa; desde hace siete meses. En el caso de Yorling Robles, por segunda ocasión está detenido; en julio del 2020 ya había sido arrestado de forma ilegal y señalado por detonar bombas de contacto, pero fue dejado en libertad 76 horas después. Sin embargo, la justicia de Ortega lo vuelve a capturar y lo señaló de delitos comunes.
