La socióloga y activista de derechos humanos exiliada, Haydee Castillo asegura que ha llegado el momento para que todas las fuerzas opositoras se unan de una vez, y junto al pueblo que «tiene la ultima palabra», obliguen a los dictador a abandonar el poder.
«Yo creo que ha llegado el momento de un gran diálogo nacional, no con el régimen ni con la comunidad internacional, sino entre las fuerzas de la resistencia y de la oposición que en realidad quieren no una salida maquillada sino un cambio de sistema… Pero quien tiene la ultima palabra para la salida del régimen es el pueblo de Nicaragua, y ello requiere de una dirección, de una estrategia, de un entramado organizativo», afirmó a Artículo 66 la opositora en el exilio.
Noticia relacionada: Líderes de base presionan a la Alianza Cívica para quedarse en la Coalición Nacional
Segun Castillo, las últimas encuestas hablan por si solas acerca de la desconfianza que tiene el 70% de la población en los partidos políticos por ser causante junto al régimen de la crisis que desató la rebelión y del desmontaje de la institucionalidad y las libertades en el país.
«Hoy las noticias reflejan información de que la Alianza Cívica se va de la Coalición Nacional, hay toda una incertidumbre de cuál será el comportamiento del PLC ya que no ha roto con el régimen al tener más de 200 funcionarios de su partido cogobernando con él. Hemos visto el descontento de algunos sectores como el estudiantado entre otras manifestaciones, de la dificultad real para aglutinar a la oposición y a la resistencia en la CN lastimosamente. Es una realidad que no se puede esconder, ya que a pesar de todos los esfuerzos que algunos sectores de buena fe han hecho para impulsar una Coalición que pueda hacerle frente al régimen, ésta muestra serias dificultades para cumplir con ese rol», opinó.
No obstante esas dificultades, Castillo considera que un aspecto relevante es que el pueblo de Nicaragua, a pesar del alto nivel de represión del régimen, sigue resistiendo desde diferentes lugares y formas creativas, y un ejemplo de ello son los presos y presas en su huelga de hambre, las papeletas y pintas por todas partes en el país, entre otras manifestaciones de resistencia pacífica.
Noticia relacionada: «Marañas ideológicas», la principal trampa que dificulta el proceso real de unidad dentro de la Coalición Nacional
Sin embago, advierte que «el tiempo se nos está agotando, el pueblo, el exilio, los presos, las víctimas urgen que se consolide a la mayor brevedad ese espacio de la sociedad civil que estuvo en la rebelión de abril sin exclusiones, hay muchos actores y sectores preponderantes que no están en este momento en la CN».

La opositora en el exilio afirma que es urgente que todas las fuerzas opositoras se sienten ya en un diálogo nacional entre ellos y que «en ese gran diálogo nacional interno se deben escuchar todas las voces, conformar allí un núcleo directivo de la resistencia y oposición de la sociedad civil que goce de la legitimidad de ese 70% que no cree en los partidos ni en caudillos, ni en cúpulas. Con esa fuerza ya cohesionada y en consenso formular un plan de presiones internas y externas, de acciones sincronizadas que permitan debilitar al máximo al régimen».
Propone «ruta del volcán»
Y agregó que «es cierto que los niveles de represión son altísimos, entonces con objetividad las fuerzas que están dentro pueden determinar qué es posible hacer para evitar más costos humanos, ¿será que ya llegó la hora de que el mismo día que se anuncian sanciones y presiones por parte de la comunidad internacional estas se potencien con algunas acciones pacíficas?» se interrogó activista política.
Y ante esa interrogante Castillo propone una huelga de brazos caídos, que simultáneamente en todo el país se pongan velas en las aceras, que se dejen de pagar temporalmente algunos servicios. Además, que se celebren misas campales por las libertades. «Estoy segura que si se ponen a discutir entre todos qué hacer para optimizar esta alineación entre la Unión Europea y Estados Unidos de presión al régimen, saldrán las ideas. Lo peor es no hacerlo».
La promotora de los derechos humanos afirma que desde el exilio y la diáspora junto a algunos territorios y organizaciones de adentro de Nicaragua propusieron una ruta de salida a la crisis que llaman la «Ruta del Volcán» que contempla varias propuestas.

«Un gran diálogo interno entre las fuerzas de resistencia y oposición formales y no formales sin exclusiones para acordar una nueva ruta de salida del régimen. Definir conjuntamente un Plan de Presiones Internas y Externas para debilitar al máximo al régimen. Organizar el país desde cada lugar en torno a ese plan de presiones bajo la creatividad y realidad que se vive en cada lugar e igual en el exterior con exilio y diáspora definir un plan de transición de lo que implica la recuperación de todas las libertades (de los presos y presas políticos, retorno del exilio, desarme de paramilitares, retorno de los organizaciones de los Derechos Humanos, los que implica, arrancarle al régimen de nuevo la libertad», propone Castillo en la denominada Ruta del Volcán.
Noticia relacionada: Propuesta de reformas electorales consensuada en la Coalición Nacional le mueve el piso a CxL
Además, la propuesta incluye «definir con la participación del pueblo, cuál es la oferta a la nación una vez que se vaya la dictadura para devolver la esperanza a la población. Y una vez teniendo claridad de lo que queremos, sin exclusiones, con los verdaderos liderazgos plantearle a la comunidad internacional el camino trazado y lo que se continúa esperando de ellos».
Según el punto de vista de Castillo, la dictadura no se irá por su propia voluntad y aunque actualmente esté acorralada y debilitada, todavía se aferra al poder y hace daño. «Pero con una resistencia y oposición amplia, concertada, inclusiva, que coopere en vez de competir, se puede organizar el plan de salida del régimen».
«La Ruta del Volcán propone que es mejor organizarse en torno a como conquistar las libertades primero, como lograr la salida de los presos, y ese mismo proceso preparará al pueblo para una posible contienda electoral y no al revés. No se puede seguir poniendo la carreta delante de los bueyes. El tiempo apremia, es ahora en este mes que hay que abrirse a ese gran diálogo interno de la sociedad civil», finalizó Castillo.