La exrea política Tania Muñoz Pavón, originaria del municipio de
Niquinohomo, Masaya, denunció que la Empresa Nicaragüense de
Acueductos y Alcantarillados (Enacal) le suspendió el servicio de agua potable. Los trabajadores de la institución que operan bajo las órdenes del orteguismo llegaron a su vivienda ubicada en el barrio Fátima Pavón y sin dar explicación
procedieron a cavar donde está el medidor y a sellar la tubería.
Muñoz denunció a Artículo 66 que uno de los empleados de Enacal le
comentó a una de sus hijas que el corte se efectuó porque debe 91 mil córdobas, sin embargo, esta aduce que la deuda era de 31 mil, la cual ha disminuido, luego que su hermano José Dennis Muñoz Pavón llegara a un arreglo de pago el 15 de septiembre de 2019, reduciéndose el monto a 19 mil córdobas. La acción la efectuaron el viernes, 17 de enero de 2020.
“Mi hermana, Carmen del Socorro Muñoz Pavón le mostró los recibos ya
pagados, así como el documento donde hicimos el arreglo de pago, pero los
hombres que vinieron a cortar, los cuales conozco y sé que son paramilitares,
le empujaron la mano y le dijeron que ellos son mandados”. Además, Tania
Muñoz señaló que el plazo para pagar este mes no se ha vencido, porque
tenían tiempo hasta este sábado, 18 de enero.
Represalia en su contra
Para la exrea política de la dictadura, este es un acto de represión por ser una
de las voces más fuertes en contra de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, quien a través de sus fanáticos y paramilitares han amenazado a ella y a su familia de muerte.
“El único culpable de todas estas injusticia en mi contra es el gobierno
de Daniel Ortega, porque yo voy al día con mis recibos, pero desde que
salí de la cárcel no he dejado de protestar y exigir justicia han emprendido
asedios e intimidación en mi contra. A diario recibo papeles con amenazas que me van a quemar la casa y que van a matar a mis hijos, pero yo confío en Dios y sé que pronto se hará justicia en Nicaragua”.
El miércoles, 15 de enero, Muñoz Pavón señaló en entrevista a este medio
de comunicación los altos costos en el servicio de energía eléctrica, los cuales
ascienden a 1,636 y 2,212 córdobas, correspondientes a los meses de
diciembre y enero de 2019, los cuales según ella son tarifas exageradas porque nunca han consumido esa cantidad.
“Primero fue la luz, quieren que pague el capricho de ellos, lo cual no lo voy a hacer, porque nunca he consumido esa cantidad y ahora me hostigan cortándome el agua, sabiendo muy bien que hay un arreglo de pago y que tenía chance de pagar mañana”.
Denuncia amenazas de muerte por una simpatizante orteguista
Al cierre de esta nota, Tania Muñoz se comunicó por vía telefónica con Artículo 66 y denunció que una vecina, identificada con el nombre de Lillian Soraya
Muñoz Pérez, quien vive frente a su casa, llegó al centro de trabajo de su hijo
Deybis Alberto Muñoz, de 29 años, y le comentó que “me calmara porque su hijo Erick Reyes Muñoz me iba “turquear”, porque solo indirectas le tiró y que
además iban a agredir a mis hijas y que también me iba a meter presa porque
mucho jodo”.
Según Muñoz, esta denuncia la hace pública ante cualquier atentado que sufra
ella o sus familiares. “No tengo miedo, porque lo perdí desde que estuve
secuestrada, pero no puedo permitir que me sigan haciendo daño solo por
exigir justicia y libertad. Tania Muñoz estuvo secuestrada 10 meses en el Sistema Penitenciario de Mujeres, conocido como “La Esperanza” en Tipitapa, la dictadura la acusó de terrorismo y crimen organizado. Fue excarcelada el 20 de mayo de 2019.
Actualmente se gana la vida vendiendo pinolillo y frijoles cocidos en su casa,
ya que el régimen orteguista mantiene constante asedio en su contra, impidiendo que pueda trabajar a como lo hacía antes que fuera secuestrada.