El ciudadano Ervin Reynaldo Gallos Salgado de 34 años, originario de León, está desaparecido desde el seis de julio de 2018, después que estuvo activo en los tranques del Reparto La Pintora, en la ciudad universitaria. Ha pasado un año desde su desaparición y la familia aún no lo encuentra y sospechan que lo asesinaron y enterraron sin permitir a su familia que lo reconociera.
Su madre Esperanza Salgado dice que lo ha buscado “por cielo y tierra” y no lo ha encontrado, por lo que sospecha que el gobierno cobró venganza porque el ciudadano participó de las protestas antigubernamentales que se desataron después de abril de 2018.
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“Yo lo que le pido al Señor (Dios), es que me lo entreguen vivo o muerto, que me digan dónde está mi hijo para enterrarlo yo, sino que me den una pista para yo encontrar a mi muchacho, yo hoy lo siento muerto, mañana lo siento vivo, porque me niego a aceptar”, expresó su progenitora quien interpuso denuncia ante la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH)
Al momento de su desaparición, en julio de 2018, su familia pensó que se encontraba detenido, lo buscaron en la Dirección de Auxilio Judicial, mejor conocido como “El Chipote”, y otras delegaciones policiales, pero su búsqueda fue en vano.

“Estoy denunciando la desaparición de mi hijo, tengo un año de andarlo buscando por todos lados, a él me lo agarraron en el barrio La Pintora el seis de julio a las nueve de la noche. Nosotros lo hemos buscado por cielo y tierra a mi hijo y no lo hemos encontrado”, afirmó Esperanza Salgado, madre del desaparecido.
Hallazgo de un cuerpo calcinado y decapitado
En Julio de 2018 se conoció el hallazgo de un cuerpo calcinado y decapitado en el reparto “La Pintora”, exactamente donde fue visto por última vez el ciudadano Gallos Salgado. La familia, en ese momento, sospechó que se trataba de él, por lo que pidieron a las autoridades un permiso de exhumación del cuerpo para confirmar si se trataba de su pariente, solicitud que fue denegada.
“Yo tengo fotos del hombre a donde sale calcinado, y fui al lugar a donde el hombre está enterrado, fuimos a la Policía a pedir permiso pero nos dijeron que no nos podían dar el permiso para sacarlo, que cuando cumpliera un año volviéramos. Fuimos ahorita y el comisionado que manda ahí en León dijo que de parte de ellos no iban a mover un dedo por mi hijo”, señaló la madre.
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Por su parte la abogada de la CPDH, Carla Sequeira afirmó que la actitud de la Policía de León corresponde a un abuso de autoridad y una negligencia institucional, porque se niegan a investigar la identificación del cuerpo encontrado calcinado y decapitado.
“Ya sabemos que la Policía no va a realizar ningún tipo de investigación en cuanto a los hechos del crimen que se cometió, que debería de realizarlo, sin embargo los familiares no están pidiendo que se investigue, están pidiendo que se aclare y que identifiquen el cadáver, quieren saber si esos restos son de su familiar o no”, añadió Sequeira.