El observatorio ciudadano Urnas Abiertas denunció que la campaña electoral de las próximas elecciones presidenciales en Nicaragua, inició con un sinnúmero de irregularidades y con pocos simpatizantes.
Los partidos colaboracionistas del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, en esta contienda electoral son: Alianza por la República (APRE), Partido Liberal Independiente (PLI), Alianza Liberal Nicaragüense (ALN), Partido Liberal Constitucionalista (PLC), Partido Camino Cristiano Nicaragüense (CCN) y Yatama, los que van a un proceso controlado totalmente por el oficialista Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) con absoluta sumisión.
Por su parte, el Consejo Supremo Electoral (CSE) subordinado a la dictadura de Ortega-Murillo, prohibió a los partidos políticos realizar caravanas vehiculares, caminatas, concentraciones y aglomeraciones políticas, alegando que estas restricciones se deben a la pandemia del COVID-19, pese a que cada fin de semana el gobierno despliegue centenares de eventos culturales y de turismo, en los que la propaganda a favor del candidato Daniel Ortega es parte central.
Noticia relacionada: Llaman a la comunidad internacional a desconocer proceso electoral de Nicaragua por carecer de garantías y legitimidad
La institución estatal utiliza la pandemia del coronavirus para «restringir aún más los derechos políticos en Nicaragua» asegura la plataforma ciudadana.
Urnas Abiertas detalló que hubo varios incidentes entorno al arranque de la campaña electoral, como es el caso del partido Alianza Liberal Nicaragüense (ALN) que «en la víspera de iniciar la jornada electoral, anunció que la actividad programada para el sábado 25 de septiembre en Carazo fue aplazada porque el permiso les fue “negado rotundamente” por las autoridades».
Mientras tanto, el Partido Liberal Constitucionalista (PLC) inauguró su campaña electoral en el departamento de León. «Walter Espinoza, candidato presidencial y su compañera de fórmula Mayra Argüello, llegaron a ese departamento donde abrieron cuatro casas de campaña. En cada localidad participaron 25 personas y no 200, que es el máximo, pues esa fue la cantidad de asistentes autorizados por la Policía Nacional».
Al igual que el PLC, el partido Camino Cristiano Nicaragüense (CCN) no reportó ningún incidente de violencia política durante sus actividades. Este grupo realizó un evento político-religioso en un hotel en Managua al que asistieron más de 100 personas.
Por su parte, el partido Alianza por la República (APRE) empezó su campaña electoral digitalmente, en donde realizó apenas dos publicaciones en sus redes sociales.
«Del Partido Liberal Independiente (PLI) no hay rastros exactos. Sin embargo desde la página “Masaya PLI” se constató que el movimiento político en el departamento de Masaya inauguró su campaña hasta este lunes 27 de septiembre» indicó la plataforma Urnas Abiertas.
Noticia relacionada: Urnas Abiertas detectó 928 irregularidades en la verificación ciudadana
El organismo sostuvo que el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) «no anunció un arranque de campaña electoral como tal, pero sí convocó a 4.300 actividades recreativas que fueron anunciadas por Rosario Murillo, en medio de un grave pico epidémico de Coronavirus».
Agregó que «las condiciones de esta campaña política es desigual porque el FSLN se encuentra en permanente propaganda desde las instituciones del Estado, estructuras barriales y sus medios de comunicación y redes sociales».
FSLN en permanente vigilancia y amenaza
Urnas Abiertas denunció que el sábado 25 de septiembre, «directores de colegios públicos en compañía con miembros de la Asociación Nacional de Educadores de Nicaragua (ANDEN-FNT) instaron a los docentes a salir a las calles para visitar a simpatizantes sandinistas para comprometerlos a votar por Daniel Ortega y Rosario Murillo el próximo 7 de noviembre. Los maestros deben rellenar unas fichas que indiquen los datos de las personas visitadas y fueron amenazados con despidos en caso de incumplir el mandato».
Asimismo, señalaron que los simpatizantes del Frente Sandinista, a través de redes sociales, advierten a los opositores en sus publicaciones, de no salir a las calles a realizar manifestaciones durante este período.
La campaña electoral, que según el Calendario Electoral culmina el 3 de noviembre, «estuvo marcada por una serie de irregularidades que deslegitiman aún más el proceso realizado hasta ahora» aseguró la plataforma ciudadana.
Además, alegan que «no es la primera vez que el CSE realiza maniobras que afectan el proceso electoral basado en esta situación de salud mundial, el 12 de agosto este órgano modificó el Calendario Electoral invocando la pandemia para disminuir el período de la campaña electoral de 75 a 40 días».