Aunque los precios de las frutas para elaborar el tradicional almíbar se mantienen estables, la demanda aún es baja en los mercados del país. El costo para la elaboración del almíbar podría superar los mil córdobas, según vendedores del Mercado Oriental, de Managua.
El postre tradicional de Semana Santa es elaborado con frutas tropicales conservadas en dulce. Los comerciantes ubicados en el sector de El Novillo, en este popular centro de compras, señalan que a pesar de los bajos precios de los jocotes, mangos maduros, papayas verdes y cocos, «todavía hay poco movimiento».
Noticia relacionada: ¿Cuánto sobrevive del exquisito menú de Cuaresma y la Semana Santa?
«Esperamos que mejore este lunes», dijo una comerciante que considera que las familias esperan el pago de esta última quincena. Los vendedores consideran que las escasas ventas se deben a que aún faltan siete días para la Semana Santa.
Actualmente, el medio balde de jocotes verdes tiene un valor de entre los 200 y 220 córdobas, en dependencia de la calidad de la fruta. «Hay lugares donde cuesta un poco más de 220 córdobas. El precio depende del tamaño y la calidad de la fruta», explica Francys López, vendedora de frutas, originaria del municipio de La Concepción, en el departamento de Masaya.
Mangos escasos
Durante un recorrido realizado por este centro de compras, se pudo comprobar que los comerciantes reportan una leve escasez de mango liso maduro, que se utiliza para elaborar el almíbar.
«Hay pocos mangos. Las cosechas no han sido buenas, los árboles todavía siguen floreciendo y otros árboles tienen mangos pequeños, creemos que eso se debe porque el año pasado el invierno no fue tan bueno», observa Ramón Quintana, comerciante de frutas en este sector del Oriental.
«Ahorita la docena de mangos liso maduro cuesta 60 córdobas, le sale a cinco córdobas cada mango, pero, si se fija, la fruta no es de tamaño muy grande», señala.
Los comerciantes también ofrecen magos verdes al mismo valor. «Casi no hay mangos, tenemos verdes porque hay gente que así le gustan para preparar su postre santo», añade.
Atados de dulces con precio estable
En el mercado Oriental, las bolsas de cuatro tapas de atados de dulce negro de rapadura se cotizan entre los 60 y los 80 córdobas, en dependencia del tramo y de dónde se ofrecen.
«Estamos abastecidos de dulces. De momento, no hay aumento en el precio, por lo que las familias pueden estar tranquilas de que van a poder preparar sus conservas de frutas», aseguró otra comerciante.
Los vendedores explicaron que los dulces son traídos de algunos municipios de Carazo, pero que a pesar de la alta demanda que tendrán a partir de esta semana, los precios podrían mantenerse. «Esperemos que no suban de precio, hay mucha gente que los ocupa hasta para elaborar chicha de maíz y fermentar», expuso la vendedora.
Precios de otras frutas
En los pasillos del mercado Oriental se pudo constatar que el precio de un coco seco y sin cáscara se cotiza entre los 30 y 40 córdobas. «El precio depende del tamaño. Aunque el coco subió de precio, lo estamos vendiendo con normalidad. Esperamos abastecernos más en esta semana», expresó don Jesús Rocha.
Otras de las frutas que se utilizan para preparar el almíbar y que actualmente se cotiza desde los 50 córdobas, es la papaya verde. «Las papayas verdes de tamaño mediano cuestan desde 60 córdobas y ahora vienen a abastecernos en esta semana, esperemos que las familias se acerquen a comprarlas para preparar su almíbar», dice Gloria Zepeda, también comerciante.
Noticia relacionada: Católicos nicaragüenses celebran la cuaresma bajo la «constante vigilancia» de los agentes represivos de Ortega
Familias resienten precios
A pesar de que los comerciantes insisten en que los precios de las frutas están asequibles, algunos pobladores de Managua se quejan de los costos, porque aseguran que «el bolsillo no les ajusta» para preparar el almíbar.
«Me sale mejor comprar una porción de las que venden en 50 córdobas. Todo está caro y no tengo capacidad para gastar más de mil córdobas en un almíbar, prefiero priorizar la comida de la casa», comparte doña Rosa Müller, habitante de la periferia de Managua.
Noticia relacionada: Arranca la Cuaresma y católicos de varias parroquias lamentan ausencia de sacerdotes y obispos
Muchas familias opinan igual que Müller, porque aseguran que la carestía en los precios de la Canasta Básica no les permitirá disfrutar de su postre santo.
«Me quedaré esperando a ver si algún vecino hace y me comparte, aunque quiera hacerlo, no puedo. En la casa somos ocho personas las que vivimos y no todos trabajan. Ya vendrán tiempos mejores», expresa doña Rosario Vásquez, también de Managua.