La Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN-Managua) envió una circular para informar a los docentes y administrativos sobre el cambio del lema institucional. La universidad estatal anuncia la eliminación de la expresión «¡A la libertad por la universidad!», que había acompañado a esa casa de estudios desde tiempos de la dictadura somocista, cuando esta Alma Máter se convirtió en un bastión de resistencia contra aquel otro régimen dinástico.
En lugar de «¡A la libertad por la universidad!», ahora la UNAN-Managua adopta el lema de «¡Universidad del pueblo y para el pueblo!», una expresión que identifica más a la institución académica con la propaganda de la nueva dictadura sandinista, el que deberá aparecer en todos los documentos oficiales, a partir del martes, 23 de abril.
Noticia relacionada: Ortega prioriza a su aliado norcoreano y cierra la embajada nicaragüense en Corea del Sur
La misiva fue dirigida a los titulares de Direcciones, Áreas de Conocimientos, Centros Universitarios Regionales y Centros de investigación. Indica que la «Secretaría General de la UNAN-Managua, en uso de sus atribuciones, por este medio comunica que en sesión ordinaria 19-2024, del 15 de abril de 2024, el Consejo de Dirección» se aprobó la implementación de la nueva frase.
El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, aislado de la comunidad internacional, cerró la embajada nicaragüense en Corea del Sur, según informó el exembajador de Nicaragua ante la Organización de Estados Americanos (OEA) Arturo McFields, la mañana del miércoles, 24 de abril.
En su cuenta oficial de la red social X, el exdiplomático publicó un vídeo anunciando que las autoridades surcoreanas confirmaron el cierre del consulado nicaragüense. «Ortega prioriza los recursos y mayor trabajo con Corea del Norte, una nación calificada como un Estado terrorista», comentó McFields.
El exrepresentante reiteró que el gobierno norcoreano «vive amenazando a la comunidad internacional con bombas nucleares» y que, además, la reciente clausura del consulado «significa un salto al vacío, mayor aislamiento y pobreza para Nicaragua».
La noticia también fue confirmada por un alto funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores surcoreano al medio de comunicación The Korean Herald. El trabajador indicó que el principal motivo del cierre fue «debido al empeoramiento de las condiciones financieras».
«Tras la decisión, parece que la embajada en Corea del Sur permanecerá cerrada por el futuro previsible», expresó. El funcionario también precisó que «un embajador nicaragüense, ubicado en un tercer país, también se encargará de los asuntos de Corea, simultáneamente, para mantener las relaciones diplomáticas con Corea del Sur».
El dictador de Nicaragua, Daniel Ortega, se encuentra en Venezuela, desde la madrugada del miércoles, para participar en la XXIII Cumbre de la llamada Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP).
Venezuela es uno de los pocos países a los que Ortega puede viajar sin enfrentar protestas de repudio por parte de la población local y de exiliados nicaragüenses que se encuentran en muchos países del mundo.
Según medios de comunicación al servicio de la propaganda de la dictadura, citando a medios aliados venezolanos, Ortega llegó a Caracas en horas de la noche-madrugada, donde fue recibido por el canciller de la dictadura de ese país suramericano, Yván Gil y el Secretario Ejecutivo del ALBA-TCP, Jorge Arreaza. Su homólogo, el dictador venezolano, Nicolás Maduro, no acudió al aeropuerto caraqueño a recibir a su par nicaragüense.
El dictador Ortega, que no comparece en público en Nicaragua desde hace más de un mes, viajó a Venezuela para reunirse con los mandatarios de los países que integran el ALBA-TCP, una alianza que no deja ningún beneficio a Nicaragua actualmente, pues ninguno de los países que la integran aparece como socio comercial importante para el país, según lo demuestran las estadísticas de importaciones y exportaciones del Banco Central de Nicaragua (BCN).
Noticia relacionada: Ortega está en Venezuela, uno de los pocos países a los que puede viajar sin enfrentar actos de repudio
Durante los últimos años, el dictador nicaragüense solo ha viajado a Cuba y Venezuela, dos de las dictaduras más totalitarias en la región, junto con la del propio Ortega.
A partir de ahora, todo el personal sanitario público o privado, y farmacéuticos que quiera participar en capacitaciones relacionadas con medicamentos, equipos o instrumentos médicos, dentro o fuera del país; así como distribuidores de medicinas o quien sea, que quiera promocionar servicios o celebrar congresos de salud en Nicaragua, está obligado a pedir permiso al Ministerio de Salud (Minsa) quien deberá autorizarlo sino, no podrá hacerlo.
Así lo estableció el régimen de Daniel Ortega, a través de la circular MS-ANRS-MLRG-0007-20-04-2024, de la Dirección General de Regulación Sanitaria (DGRS), del Minsa, emitida el 20 de abril y dirigida a los representantes de distribuidoras farmacéuticas, laboratorios y empresas de equipamiento e instrumental médico nacionales y no nacionales.
La orden ministerial, firmada por Martha Ligia Rosales Granera, directora de la DGRS establece que «toda actividad relacionada con capacitaciones, lanzamientos de productos, congresos y actividades técnicas científicas, congresos nacionales e internacionales, , y cualquier otra promoción de productos, que vayan a realizar dentro o fuera del país y que conlleve la participación de personal del sistema de salud pública y privada, debe ser conocida con 30 días de anticipación, y autorizada por el Minsa».