Laureano Ortega Murillo, hijo de los dictadores de Nicaragua y nombrado por su padre como asesor presidencial para las inversiones, continúa con su delirio de negocios espaciales, y este martes, 19 de marzo, se reunió con una delegación del Centro de Cooperación Internacional del Laboratorio de Exploración del Espacio Profundo (DSEL), con el que Nicaragua firmó un memorándum de entendimiento para meter al país en el proyecto chino de viajes a la luna.
La delegación asiática, enviada por la «Administración Nacional Espacial de la República Popular China» firmó el memorándum con el Consejo Nacional de Universidades (CNU) presidido por la sandinista Ramona Rodríguez.
Todos los medios de la propaganda oficialista han destacado la información y la vicedictadora Rosario Murillo de igual manera elogió la visita de los asiáticos y dijo que las reuniones sostenidas y los acuerdos firmados entre DSEL, el CNU y las evaluaciones de proyectos con la Secretaría para el Espacio Ultraterrestre, de Nicaragua «sientan las bases para una cooperación permanente entre las instituciones de ambos países en el campo de la formación y proyectos conjuntos».
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«Nicaragua ha reiterado su firme disposición de trabajar con China en el campo de las tecnologías satelitales y proyectos de cooperación espacial y fomentar la cooperación técnica y la formación…», señala la nota de prensa leída por Murillo.
Meten a Nicaragua en proyecto de estación espacial lunar
Según la información divulgada por los propagandistas del régimen, el memorándum de entendimiento firmado con el DSEL de China, permite la participación de Nicaragua en el desarrollo de la «Estación Internacional de Investigación Lunar».
El acuerdo, que entró en vigencia inmediatamente después de su firma y será válido por cinco años, establece que las partes firmantes cooperarán en el desarrollo de la Estación Internacional de Investigación Lunar, «para ayudar a construir una comunidad con un futuro compartido para la humanidad en el ámbito del espacio ultraterrestre». China proyecta empezar la construcción de su estación lunar para inicios de 2030.
Asimismo, el documento firmado dispone que las partes «cooperarán ampliamente en la demostración, implementación de ingeniería, operación y aplicación» de la estación de investigación lunar.
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También en «diseño y desarrollo conjuntos, el embarque de instrumentos científicos, los experimentos científicos y técnicos, el intercambio y análisis de datos, la educación y la capacitación, y el desarrollo de capacidades de exploración espacial».
Para 2021, el dictador Daniel Ortega ordenó a la Asamblea Nacional aprobar la Ley creadora de la «Secretaría Nacional para Asuntos del Espacio Ultraterrestre, la Luna y Otros Cuerpos Celestes».
Hasta ahora se desconoce cuales son las actividades científicas que ha desarrollado esa secretaría. Tampoco se conoce de la existencia de un equipo de nicaragüenses expertos en estudios espaciales.
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Una vez, Laureano Ortega prometió a Nicaragua un satélite chino, el NicaSat1, que costaría 300 millones de dólares y entraría en funcionamiento en 2016. Supuestamente convertiría a Nicaragua en un país independiente en materia de telecomunicaciones. Del proyecto del satélite solo se conocieron las numerosas fotos de Ortega Murillo en reuniones y una maqueta a escala que trajo al país de uno de sus viajes a China, pagados con fondos estatales. Nunca se supo más nada del satélite.