El pasado 23 de noviembre, la directora de Miss Universo-Nicaragua Karen Celebertti arribó al aeropuerto internacional de Managua procedente de México, acompañada de hija, para reunirse en su hogar con el resto de su familia, pero la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo se lo impidió, le prohibieron la entrada a su nación y la regresaron al país azteca, dictando de facto un destierro que separa a otra familia nicaragüense por tiempo indefinido.
Celebertti es la dueña en Nicaragua de la franquicia del concurso de belleza femenina más importante del mundo y participó, junto a la recién electa Miss Universo nicaragüense Seynnis Palacio, en el lanzamiento de México como próxima sede del evento mundial.
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Poco tiempo después de desterrar a la exmodelo y empresaria, el régimen ordenó a su Policía represiva el asalto a su casa, localizada en Managua, y el arresto de su esposo, Martín Argüello Leyva, quien hasta ahora se mantiene incomunicado, según versiones periodísticas.
¿Quién es Celebertti y por qué tanto odio y saña de la dictadura contra ella y su familia?
Nacida en la Perla del Septentrión, Matagalpa, al norte del país, Celebertti saltó a la fama cuando también quiso ser Miss Nicaragua y soñó con convertirse en la reina universal de la belleza femenina.

En 1992, en un país que aún olía a pólvora y no se apagaban las velas en honor a los asesinados en la guerra de los 80, durante la primera dictadura sandinista, Celebertti buscó la corona de Miss Nicaragua, representando a su departamento natal. Fue segunda finalista y así la conoció el país entero y traspasó las fronteras al participar en representación de su país en el concurso Miss Hispanoaméricana.
Su participación en estos concursos le abrió las puertas del modelaje y logró representar a diferentes marcas importantes en el país y además fundó su propia agencia de modelos, Silhuetas,.
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En 2001, la modelo, empresaria y graduada de administración de empresas en la ahora confiscada Universidad Centroamericana (UCA), adquirió la franquicia de Miss Nicaragua, que antes era controlada por el Estado a través del Ministerio de Turismo.
22 años después, esa franquicia, bajo la dirección de Celebertti, le dio a Nicaragua y a toda Centroamérica su primera miss universo de la historia, y no una miss cualquiera, se trata de una joven talentosa, emprendedora y la coronada más aclamada y aceptada internacionalmente de los últimos años.
En 2020, en declaraciones a medios de comunicación, Celebertti expresó con vehemencia: «No sueño, estoy segura de que Nicaragua tendrá un día una Miss Universo». Lo cumplió el 18 de noviembre pasado, cuando millones de televisores en el mundo proyectaron la imagen de Sheynnis Palacios siendo coronada como la soberana de la belleza femenina mundial.
Además, entre sus otros logros destacan, El top 10 de Xiomara Blandino en 2007, el top 16 de Nastassja Bolívar en 2013, un top 21 de Ana Marcelo en 2021 y el reinado actual de Palacios.
Pero esos resultados de Celebertti, lejos de agradar a la dictadura la irritaron, sobre todo porque el triunfo, que se ha convertido en una luz de esperanzas para el pueblo de Nicaragua, fue alcanzado por dos mujeres que han hecho público su rechazo al régimen dictatorial de los Ortega-Murillo.
Azul y blanco
Reportes periodísticos de 2018 indican que Celebertti, como cientos de miles de nicaragüenses en todo el país, participó en las marchas cívicas de ese año exigiendo libertad y democracia.

Durante la insurrección popular iniciada en abril de 2018, la directora de Miss Universo-Nicaragua no se quedó callada y multiplicó, a través de sus redes sociales, el clamor nicaragüense por el fin de la opresión y defendió el derecho del pueblo a manifestarse.
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Pero no se quedó en palabras, los reportes de prensa de entonces informan que, el 16 de marzo de 2019, durante la marcha denominada «A La Calle», que fue convocada por la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), la directora de Miss Universo-Nicaragua fue retenida por la Policía orteguista, junto a Lolo Blandino, padre de Xiomara Blandino —exreina de belleza y ahora nuera de Daniel Ortega y de Rosario Murillo— y otros opositores que participaban en la expresión de protesta contra la dictadura.
Dictadores quieren control de Miss Universo Nicaragua
Celebertti es obstáculo para el régimen, que ha dejado ver su odio contra los logros de la mujer exmodelo y empresaria al punto que la nuera de los dictadores, la exmiss Nicaragua Xiomara Blandino, que fue discípulo de Celebertti haya criticado a su antigua formadora.
La esposa, en segundas nupcias, de Juan Carlos Ortega Murillo, participó representando a Nicaragua en Miss Universo en 2007 y logró llegar al Top 10, lo que había sido hasta este año, el mayor logro de una nicaragüense, y todo ello de la mano de Celebertti, sin embargo la nuera de los tiranos recientemente se lanzó en críticas contra la dueña de la franquicia del concurso.
Según Blandino, Celebertti no ha sabido manejar la franquicia en el país porque «hemos tenido una organización de Miss Nicaragua que ha sido bastante cerrada, muy hermética, muy selectiva, no da oportunidad a mucha gente, se desarrollan algunas personas, le da oportunidad a quienes ellos deciden».
Mientras la directora del concurso en el país inicia su destierro, aún no se sabe si la miss universo 2023 podrá entrar al país, y mientras tanto, el destino de Miss Nicaragua está en veremos.