Los relevos de carceleros no paran en la pequeña celda donde el régimen de Nicaragua ordenó encerrar a monseñor Rolando Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Estelí.
La orientación es que el religioso debe permanecer bajo vigilancia las 24 horas del día y además deben requisar su celda. Bloquean hasta que los presos comunes que están en el Sistema Penitenciario Jorge Navarro se le acerquen o tengan la más mínima comunicación con él.
El jerarca fue trasladado a “La Modelo” el nueve de febrero de 2023. Llevaba seis meses bajo arresto domiciliario. El cambio de medida se debió a que el obispo se negó a abordar el avión con destino a Washington en el que iban 222 presos políticos. Para él esa salida representaba el destierro.
Noticia relacionada: Otro opositor se exilia tras ser secuestrado, enjuiciado y obligado a firmar diario en la Policía de Ortega
El medio digital Divergentes, a través de una fuente confidencial a lo interno del penal, reveló que monseñor Álvarez está en la celda 19 del módulo 3-1 del espacio de máxima seguridad, conocido como El Infiernillo.
Según la fuente de Divergentes, al obispo le proporcionan atención médica dos veces al día y ya autorizaron la entrega de paquetería enviada por sus familiares e igualmente le dan actividad de sol, pero siempre acompañado.
“Le toman fotos casi a diario para tener evidencia de que supuestamente se encuentra en buenas condiciones de salud”, añade el relato del sitio web basado en su informante en “La Modelo”.
Noticia relacionada: Ortega retira a su embajador ante la dictadura de Cuba
El régimen de Nicaragua ordenó dejar sin efecto el nombramiento de Alejandro José Solís Martínez como embajador extraordinario y plenipotenciario de Nicaragua ante la dictadura de Miguel Díaz-Canel, en Cuba.
El exdiplomático asumió la jefatura de la delegación nicaragüense en la isla en mayo de 2022, es decir, que solo estuvo un año como delegado de la dictadura ante su homólogo cubano. La caída de Solís se dio el pasado 11 de mayo, pero se hizo oficial este miércoles, 17 de mayo.
Los embajadores de Venezuela y Nicaragua presentaron este miércoles sus cartas credenciales como delegados de los regímenes de Maduro y Ortega, respectivamente; ante el rey Felipe VI. Con ello, se muestra una posible normalización de las relaciones diplomáticas con España.
Maurizio Gelli, italiano nacionalizado nicaragüense en 2009, entregó al rey sus cartas credenciales. Gelli es hijo de Licio Gelli, exlíder de la lógica masónica Propaganda Due (P2), a quien se acusa de relaciones con la mafia y la Cosa Nostra, la quiebra del Banco Ambrosiano, agente anticomunista durante la Guerra Fría, labores de conspiración durante la década de los ochenta en Argentina y escándalos financieros en Uruguay.
Organizaciones opositoras, que conforman la plataforma Unidad por la Democracia (PUDE), demandaron, a través de un comunicado, realizarle una auditoría al Banco Centroamericano de Integración Económica con el fin de conocer públicamente el financiamiento aprobado para Nicaragua, “a partir del primero de diciembre de 2018 cuando el señor Dante Mossi asume la presidencia del banco”.
Referente a próximos préstamos que se hagan a Nicaragua, antes del 30 de noviembre que se cumple el plazo de Mossi como titular del BCIE, los detractores del régimen enfatizaron que “hay que prestar atención especial a la relación entre el señor Mossi y el régimen Ortega Murillo (…) No se deben aceptar más acciones que favorezcan de forma no transparente a la dictadura”.