El migrante nicaragüense Marlon Antonio Pastora, de 33 años, originario de Nueva Guinea, murió el pasado 15 de abril, en un accidente de tránsito, en Atlanta, Georgia, Estados Unidos. La tragedia, según la organización humanitaria Texas Nicaraguan Community, cobró la vida de otras dos personas, de nacionalidad hondureña, que viajaban en el vehículo.
Jeyling Libeth Pastora, hermana del fallecido, dijo a Artículo 66 que el nacional tenía cuatro meses de haber llegado a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades de vida para sus dos hijas menores —de 12 y cinco años— y para su mamá.
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«Mi hermano se había ido a Estados Unidos para hacer una casa propia y hacer una vida mejor», relató su hermana, quien agregó que el día de la tragedia lograron tener comunicación, donde Pastora les comunicó que se iba a cambiar de Estado porque no tenía trabajo fijo.
Subrayó que lo único que saben es la información que dio uno de sus parientes sobre el deceso de su familiar. «Lo único que sabemos es que mi hermano murió en un accidente, cuando viajaba en una buseta junto a otros cuatro pasajeros».
Tras conocerse la tragedia, los familiares del joven migrante iniciaron una campaña para recoger apoyo económico para poder lograr su repatriación. «Marlon —Pastora— era un joven muy inteligente y valiente; desde pequeño era muy fuerte, pero le tocó morir fuera del país. Ahora tenemos la fe en Dios que la gente nos apoyará para que pueda ser enterrado en su país», explicó Jeyling Pastora.
Para lograr repatriar el cuerpo del joven, sus familiares necesitan cinco mil dólares, sin embargo no se ha logrado recoger todo el efectivo. Para cualquier apoyo económico los parientes pusieron a disposición el número de teléfono: +505 5773 0258.
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Desde el 2018, la ola migratoria hacia Estados Unidos ha incrementado, debido a la crisis económica que vive Nicaragua o por la represión a manos del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
En su intento, decenas de migrantes han perecido al cruzar al país norteamericano, otros son víctimas de secuestro o fallecen por otras situaciones, ya estando dentro del país.