El joven obrero chinandegano Melvin Alexander Campos, de 25 años, murió la mañana de este miércoles al caerle un pesado saco Jumbo Sacks, sobre su humanidad.
Según versiones preliminares, el accidente ocurrió en una de las bodegas de la empresa Aceitera Real, específicamente en la de empaque de harina de cascarilla de maní que produce la compañía, y que se utiliza para alimento de ganado.
Se conoció que a eso de las 10:00 de la mañana de este miércoles, el trabajador apoyaba en lo que llaman la incrustación de las uñas del montacarga, pero justo en ese momento, el equipo movió un poco el dispositivo y una decena de los sacos se desprendieron de la estiba y le cayó uno encima.
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Un grupo de obreros se movió rápidamente para salvarle la vida, pero la tragedia fue en cuestión de segundos. Otro elemento que favoreció la desgracia, es que el obrero reaccionó tardíamente y al intentar protegerse, lo hizo lamentablemente al lado donde cayó uno de los pesados sacos. «Todo fue demasiado rápido, en segundos», dijo un compañero de trabajo que lamentó la tragedia.
Fue accidente laboral
Los Jumbo Sacks se utilizan en estás industrias con el objetivo de optimizar espacio y tiempo. Llegan a tener pesos de hasta mil kilogramos.
De inmediato hubo maniobras de despeje para rescatar al obrero y trasladarlo a un centro asistencial, pero se encontraba en estado agónico y fue imposible salvar su vida. En las distintas áreas de la empresa comenzaron a lamentar la tragedia.
«Claro, es una compañía donde se imponen todas las medidas de seguridad, pero tristemente ocurrió esta muerte, un lamentable accidente laboral», expresó otro compañero de trabajo, quien acudió al velorio en horas de la noche de este miércoles. El personal administrativo y de la industria acompañaron la vela del joven que no deja hijos y que vivía en el Reparto Pedro Joaquín Chamorro, de esta ciudad.
«Nos vinieron a avisar como a la 1:00 de la tarde, no estábamos enterados, sólo nos dijeron que había muerto, que unos sacos Jumbo se habían desprendido y que uno le cayó encima», lamentó uno de sus dos hermanos recién ocurrió la tragedia.
Buen empleado
Melvin Alexander había cumplido dos años de laborar en la empresa ubicada en la salida de la ciudad de Chinandega hacia Corinto. Quienes lo conocen dijeron que siempre fue un buen empleado, muy responsable con lo que hacía.
En redes sociales, la comunidad de la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe, posteó el pésame y lamentó también lo sucedido. Él era miembro de «Los servidores del Nazareno», un grupo de jóvenes religiosos, que colabora con las actividades de ese santo.
Por Voces Unidas