Jarod Daniel Ramírez Cerda, era un joven de 18 años, originario de Managua, «un chavalo excepcional, atlético y con espíritu de superación». Así lo describe su madre, Raquel Cerda, pero la vida se le fue en segundos cuando —según denuncia su progenitora— luego que integrantes de la Juventud Sandinista (JS) lo asesinaron en el cuarto de su casa.
El martes, 21 de marzo, Ramírez Cerda cumplió 56 meses de asesinado, «cuando el jueves 21 de junio de 2018, a eso de las 12 de la noche, tres sujetos armados y encapuchados, a bordo de una motocicleta, encañonan a Jarod, que había salido un momento a la puerta de la casa», relata Raquel Cerda.
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Los encapuchados llevaron al joven hasta el fondo de la vivienda, en el cuarto en el que se encontraba su madre. Los asesinos —según la testigo presencial— se identificaron como JS (Juventud Sandinista), nombre que usa una de las turbas del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
«—Decían— que buscaban armas, increparon a Jarod que les dijera dónde tenía las armas, revolvieron todo, al insistirles que no teníamos armas, —uno de los sujetos— me apuntó directamente, pero mi hijo me avienta, éste se voltea y le dice a Jarod, “yo te dije que te iba a matar. Esto te pasa por poner barricadas y andar de manifestante”. No escuchó mis súplicas y mientras van en retirada, le dispararon tres tiros a quemarropa», relató la madre del joven asesinado, a través de una publicación en las redes sociales de AMA.
La madre y única testigo del asesinato en contra de su hijo dijo que una de las balas impactó en el tórax de Jarod, los otros dos tiros, acertaron en su abdomen.
«Jarod, cayó al suelo y ahí nomás murió. Yo pegaba gritos que me ayudaran para sacarlo a la Cruz Roja. Una vecina lo montó en su moto, pero en la Cruz Roja no me lo atendieron, lo dejaron en el pavimento y me comunicaron que para tener el acta de defunción lo tenía que llevar a medicina legal. Yo ya estaba trastornada, lo llevaron y al día siguiente fue la vela, como a las cuatro de la tarde», describió.
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Según AMA, antes de que el cuerpo del único hijo de Raquel Cerda Méndez fuera sepultado, esta se desvaneció en los brazos de su esposo y le expresó emotivamente a su hijo «¡No te vayás bebé, espérame!, ¿Qué va a ser de mi vida ahora?».
¿Quién era Jarod Daniel Ramírez Cerda?
Jarod, uno de los jóvenes que asesinó la dictadura de Ortega y Murillo en 2018, cursaba el segundo año de la carrera de Comunicación y Relaciones Públicas en la Universidad American College, en Managua, su madre lo describe como un alumno destacado apasionado por el estudio.
Aprendió inglés, mandarín y practicó varios deportes. Después que regresaba de la universidad, se iba a un gimnasio, ubicado por mercado Roberto Huembes, «donde aprendió boxeo y poco a poco fue recogiendo y compró sus guantes, sus materiales para el boxeo y por la noche se iba a hacer las ligas de futbol en los parques (…) Aprendió natación en Barracudas, no perdía ni un momento de su tiempo», destaca Raquel Cerda.
Ramírez Cerda tenía metas claras. Cuando terminara la carrera de Comunicación, quería estudiar la carrera de Odontología y pagarla con su dinero.
«Él tenía muchos sueños, quería hacer dinero, para comprar su casa, soñaba con tener un hogar, siempre conmigo, proteger a su tía Rosa. Jarod, era un muchacho amistoso, amigable, sociable, él a todo el mundo le hablaba, era caritativo, con todos los borrachitos, viejitos, con los abuelitos, para esa gente que anda pidiendo indigente, les daba comida. El día de su vela todos lo llegaron a ver, lloraron por él, por su “broder”», contó su madre.
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Jarod Ramírez era el único hijo de Raquel Cerda, quien afirma que por años buscó ese anhelado hijo. «Fue lo más maravilloso que Dios me dio los 18 años que lo tuve conmigo. Mi hijo se crió en una familia humilde pero con valores, a pesar que uno tenía sus necesidades económicas, él se propuso ser algo en esta vida, salir adelante».
«Mi hijo era la cabeza en la casa, en la que viven muchos sobrinos (niños y adolescentes), era un un faro para ellos, todos querían ser como Jarod: “yo quiero ser como Jarod, yo voy a ser como Jarod, voy donde va Jarod, que yo quiero hacer esto porque Jarod lo hace”», relató.
Ante la pregunta de ¿Por qué llegaron los JS a buscar a Jarod para matarlo si se mantuvo al margen de las protestas sociales?, una de las hipótesis de su familia es que los agentes del régimen de Nicaragua lo pudieron haber confundido con otro de sus primos que andaba en las marchas, en las barricadas por el Puente El Edén, uno de los blancos de la llamada operación limpieza, que había lanzado el gobierno de Ortega, desde el 12 de junio en Managua.
Tanto Raquel Cerda como Madres de Abril siguen demandando justicia por el crimen que sigue impune hasta el día de hoy. Según Susana López, madre de Gerald Vásquez, joven asesinado el 14 de julio de 2018, no cesarán de exigir a la comunidad internacional y organizaciones de humanos para que lleve al banquillo de los acusado los dictadores de Nicaragua, acusados de crímenes de lesa humanidad.
Las protestas sociales del 2018 dejaron más de 300 asesinados, según defensores de derechos humanos, ninguno de la autores está detenido.
