De «estrategia fallida para aniquilar a la oposición» calificó el líder estudiantil y exreo político Lesther Alemán la acción del régimen de Daniel Ortega de encarcelarlo al igual que a otro grupo de nicaragüenses, ahora desterrados.
El activista político fue secuestrado el cinco de julio de 2021 y condenado a 13 años de prisión por los supuestos delitos de «conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional, de conformidad con los artículos 410 y 412 del Código Penal, en perjuicio de la sociedad nicaragüense y el Estado de Nicaragua».
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«Al final de cuentas esto no se trataba de una sola persona, se trataba de una carrera de relevo», expresó el exprisionero político en entrevista exclusiva con el programa Al Punto con el periodista Jorge Ramos.
Señaló que aunque en «El Nuevo Chipote» no fue golpeado, sí hubo tortura psicológica constante y que los interrogatorios por la noche o en la madrugada, los oficiales de la Policía le afirmaban que ninguno de sus familiares lo había llegado a visitar, que su mamá no estaba atenta de la situación que atravesaba y que no tenía abogado defensor.
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Los policías de Ortega lo martirizaban diciéndole que Nicaragua lo culpaba por haber menoscabado la soberanía y perjudicado al Estado «y los muertos de abril que decís son culpa tuya», contó el joven opositor.
Además relató que estuvo por más de 87 días encerrado en una celda de castigo y que por más de cuatro semanas se le negó el derecho a hacer uso de artículos de aseo personal.
Pruebas «disparatadas»
En cuanto a las «pruebas», el líder estudiantil dijo que la Fiscalía usó una entrevista que en 2018 le hizo el periodista Jorge Ramos.
«El hecho mismo que estuviésemos hablando de mi situación les incomodó para presentarla como la primera prueba del juicio, aseverando que aquí —en Estados Unidos— me vine a entrenar».
Agregó que el Ministerio Público presentó una una fotografía cuando Alemán visitó a los 10 años el parque de Disneyland, acusándolo que desde esa edad «la CIA —Agencia Central de Inteligencia de EE.UU.— me inició a entrenar y que esta entrevista —con Jorge Ramos— era para pulir mi imagen como un menoscabador y traidor a Nicaragua».
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También indicó que lo más absurdo en el juicio fue cuando se le exigió que revelara cuánto dinero le había ofrecido el presidente de El Salvador Nayib Bukele, a quien lo señalaban como su familiar.
«Según la investigación de ellos —de la justicia orteguista— yo era pariente en segundo grado de consanguinidad de Bukele, lo que es absurdo», subrayó.
«Seguiré siendo nicaragüense le duela a quien le duela»
Pese a que el dictador Daniel Ortega le quitó la nacionalidad, igual que a los otros 221 exreos políticos, Lesther Alemán sostuvo que «soy y seguiré siendo nicaragüense le duela a quien le duela».
«El documento mismo no es una garantía que sea nicaragüenses porque yo nací en Nicaragua, mis adres también. Él —Daniel Ortega— me puede arrebatar mi partida de nacimiento, mi pasaporte, pero finalmente mi ombligo no lo va a poder arrebatar», recalcó.
Además refirió que lo que se ve en Nicaragua es una radicalización del régimen orteguista y que la esperanza que queda es la resistencia. También aprovechó para agradecer el «sacrificio de monseñor Rolando Álvarez y de la Iglesia católica, así como el apoyo de su madre, a quien describió como «una leona de tiempo completo».
Alemán fue liberado y desterrado de Nicaragua el nueve de febrero. Desde Estados Unidos asegura seguirá comprometido en la lucha por la libertad de Nicaragua.