Los incendios forestales que golpean la zona centro sur de Chile y que han afectado a numerosos poblados rurales ya dejan 16 personas fallecidas, según el balance entregado el sábado, cuatro de febrero, por las autoridades.
El informe, dado a conocer por el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), menciona 24 personas heridas, 88 viviendas completamente destruidas y que hay 251 incendios activos, 80 de los cuales están fuera de control.
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Ante la emergencia, el presidente chileno, Gabriel Boric, declaró que buscará apoyo internacional en busca de frenar la catástrofe.
A través de su cuenta de Twitter, Boric agradeció el apoyo de la Presidencia de Alberto Fernández y destacó el apoyo en la «coordinación y agradecimiento el apoyo de la República Argentina en el combate a incendios. Además de brigadistas, recibiremos maquinarias. Estamos gestionando apoyo de distintos países para enfrentar emergencia».
La situación, que está lejos de ser controlada, trae a la memoria la catástrofe que se vivió en esa zona a comienzos de 2017.
Entonces se produjo un megaincendio forestal que dejó 11 fallecidos, unos 6.000 damnificados, más de 1.500 viviendas destruidas y 467.000 hectáreas afectadas.
