La Comisión internacional parlamentaria de solidaridad por la libertad de los presos políticos arribó el miércoles por la tarde a Costa Rica, país del que partirán para conformar una caravana este viernes a la frontera con Nicaragua con el objetivo de constatar las condiciones de encierro de los más de 190 presos políticos y exigir su inmediata libertad.
Una delegación compuesta por tres diputadas y diputados del Frente de Izquierda y los Trabajadores Unidad (FITU), de Argentina, y representantes de distintas organizaciones de Brasil, México, Venezuela, Panamá y Costa Rica, dio a conocer ante el Parlamento Nacional que pretenden entrevistarse con los familiares de los reos y «visitar algunos de los detenidos».
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«Hay hoy en Nicaragua más de 180 presos y presas políticos principalmente producto de haberse movilizado durante las protestas de 2018 que fueron duramente reprimidas por el gobierno de (Daniel) Ortega. Algunos de ellos han recibido condenas durísimas de más de 10 años de prisión solo por el hecho de haberse enfrentado a esas políticas», refirió mediante conferencia de prensa la diputada porteña por el Partido de los Trabajadores Socialista (PTS), Alejandrina Barry.
La comitiva de parlamentarios suramericanos planea salir de San José a las 3 de la mañana para estar a primera hora solicitando el ingreso a Nicaragua. «No hay impedimento legal para entrar a Nicaragua, pero si el régimen de Ortega no nos permite entrar entonces quedará en evidencia que algo están ocultando sobre las condiciones de las personas presas políticas de Nicaragua», expresó uno de los parlamentarios.
Por su parte, la diputada Luciana Echavarría agregó que «si Daniel Ortega no nos permite la entrada a Nicaragua, esto se conocerá con más fuerza a nivel internacional y más voces se sumarán a ese clamor externo que demandan la liberación de los presos políticos en Nicaragua».
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«Vamos a entrevistarnos con los familiares que están en Costa Rica y gestionar la posibilidad de visitar a algunos de los detenidos, aunque esto depende de la voluntad del gobierno nicaragüense. Esta Comisión reclama la libertad de los presos y presas desde una posición claramente antimperialista, es decir, separándonos de la utilización que quieren hacer los Estados Unidos y los sectores políticos de la burguesía nicaragüense de las acciones represivas y del carácter autoritario del gobierno de Ortega, al que cuestionamos desde la izquierda y no desde la derecha», expresó la parlamentaria Barry.
Los familiares de presos políticos han denunciado que se presentan deterioros «graves» siendo sometidos a «constantes torturas y falta de alimentación». Además, reiteran que los derechos humanos de todas las personas presas políticas deben ser respetados, resguardar sus vidas e integridad física y emocional hasta que se produzca la liberación incondicional de los reos de conciencia. Demandan que cesen estas torturas tanto físicas como psicológicas.