La exguerrillera sandinista y miembro de la Unión Democrática Renovadora (Unamos), Dora María Téllez, fue condenada a 8 años de prisión. Ángel Jancarlos Fernández González, juez del Cuarto Distrito Penal de Juicios en Managua, fue el encargado de determinar este veredicto este jueves, 10 de febrero.
La justicia de Ortega la culpa por el supuesto delito de «conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional», bajo la Ley 1055, Ley de Soberanía; normativa que utiliza el régimen de Nicaragua para tildar de «traidores de la patria» a los opositores.
La información de la sentencia de Téllez fue revelada por el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).
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La opositora enfrentó un juicio maratónico el tres de febrero, que inició a las ocho de la mañana y culminó en horas de la tarde. La audiencia se celebró en la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocida como «El Nuevo Chipote» en Managua, donde la rehén del régimen está cautiva desde el 13 de junio de 2021.

En la totalidad de los juicios políticos celebrados contra los rehenes de conciencia, desde el primero de febrero hasta la fecha, los testigos han sido oficiales de Policía, que argumentan que los opositores «atentaron contra la patria».
«Pretenden manchar el nombre de la exguerrillera», dice el CENIDH
El Cenidh, en su cuenta de Twitter, rechazó el dictamen de sentencia contra la Dora María Téllez y enfatizó que el régimen de Ortega-Murillo «pretende manchar su nombre y su lucha por Nicaragua».
La opositora y disidente del Frente Sandinista es «historiadora, política y comandante guerrillera nicaragüense. Estudió medicina antes de unirse al FSLN, organización guerrillera en la que alcanzó el puesto de Comandante del Frente Occidente “Rigoberto López Pérez” llegando a ocupar tercer puesto al mando de la operación del 22 de agosto de 1978, en la que junto a Edén Pastora y Hugo Torres dirigió la toma del Palacio Nacional (…) y hoy es presa política del régimen de Ortega Murillo», resalta el organismo.
La opositora se convierte en la séptima presa política en ser sentenciada por la justicia de Ortega. El grupo de abogados Acción Penal considera que una vez dictada la pena de cárcel, la rea de conciencia pueda ser trasladada al Establecimiento Penitenciario Integral de Mujeres (EPIM), conocido como «La Esperanza», porque su permanencia en las celdas de «El Nuevo Chipote» es «improcedente».