Al menos un muerto, decenas de heridos y más de un centenar de arrestados es el saldo extraoficial que se reporta en Cuba luego de la ola de protestas populares que agitaron a la mayor de las Antillas a partir del 11 de julio. Miles de ciudadanos de la isla se lanzaron a las calles en diferentes municipios exigiendo el fin de la era comunista en ese país.
Aunque se desconocen cifras oficiales, en vídeos viralizados a través de redes sociales y por diversas fuentes que han contactado a medios de comunicación internacionales, se menciona que al menos una persona se ha confirmado como «asesinada» a manos de las fuerzas de seguridad del régimen comunista de Cuba, dirigido por Miguel Díaz-Canel, el heredero del poder de los hermanos Castro Ruz.
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El ministro cubano de Exteriores, Bruno Rodríguez, intentó justificar la represión que ejecuta su administración diciendo que se han visto «peores escenas de represión en Europa». Aseguró que en en ese país no hubo ningún estallido social sino «una campaña orquestada y financiada por Estados Unidos. Hubo disturbios y desorden»; según el jefe de la diplomacia comunista.
Según la Agencia de Noticias cubana (ACN), un hombre resultó muerto durante un enfrentamiento entre manifestantes y fuerzas de seguridad el 12 de julio en un barrio periférico de La Habana. Se trata de un ciudadano de 36 años que participaba ese lunes en una protesta en el Consejo Popular Güinera, del municipio de Arroyo Naranjo (sur de la capital).
Tratando de negar el masivo descontento popular contra el régimen comunista que impera en la isla caribeña desde hace 62 años, el canciller Rodríguez, en una conferencia de prensa brindada el martes 13, calificó las protestas masivas antigubernamentales iniciadas el domingo como «disturbios», aunque en los centenares de videos que se divulgaron desde el mismo momento de la explosión social se aprecian manifestaciones masivas que iniciaron pacíficas, pero se tornaron violentas luego que el presidente cubano Diaz-Canel ordenó a sus seguidores salir a las calles para enfrentar a los protestantes antigubernamentales.
Siguiendo un viejo discurso, Rodríguez al igual que su jefe, Díaz-Canel, culpan a Estados Unidos de promover y financiar el alzamiento popular y atribuyó el apagón de internet móvil en toda la isla a los problemas financieros que vive su país.
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«El país está viviendo estos días una situación compleja, el acceso a la información de nuestro pueblo es un derecho, está claro que hay condiciones complejas que se reflejan no solo en el derecho a la información, se reflejan en el derecho a la alimentación, estamos pasando dificultades», argumentó. Luego de las masivas manifestaciones el internet móvil quedó deshabilitado en un intento por pcultarrle al mundo los acontecimientos de la isla. Este miércoles por la mañana apenas empezaba a restablecerse el servicio.
Activistas locales han elaborado una lista provisional en la que figuran al menos 65 nombres solo en La Habana. Sumando las detenciones en el resto del país, los arrestos pasan de los cien, incluyendo comunicadores como el caso de la youtuber Dina Stars, que fue detenida mientras hacía una transmisión en vivo para la televisión española.
Además se ha confirmado la detención de figuras opositoras como el artista Luis Manuel Otero Alcántara, el disidente moderado Manuel Cuesta Morúa y el dramaturgo Yunior García Aguilera, mientras la familia del opositor José Daniel Ferrer denunció también su desaparición en Santiago de Cuba.
También se informó que la corresponsal del medio español ABC, Camila Acosta, fue apresada cuando salía de su domicilio en La Habana para hacer un trámite personal, según publicó el propio medio de comunicación.
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Las protestas antigubernamentales ocurridas a partir del domingo en varios puntos de Cuba son las más fuertes que han tenido lugar en la isla desde el llamado maleconazo de agosto de 1994, cuando centenares de personas salieron al célebre paseo marítimo de La Habana en medio de las penurias del llamado periodo especial y además, es la primera vez en los últimos 62 años que se realizan manifestaciones antigobierno tan masivas en numerosos lugares de todo ese territorio.
EE. UU. niega estar destrás de las protestas
El Gobierno de EE. UU. negó estar detrás de las inéditas protestas antigubernamentales en Cuba, como afirman las autoridades de la isla que buscan justificar la represión y hacerse las víctimas de una supuesta intervención extranjera.
La rebelión social recibió tal atención en Washington que el presidente estadounidense, Joe Biden, tuvo que reaccionar dos veces. En su primera comparecencia afirmó que las manifestaciones son «una llamada a la libertad» tras «décadas de la represión y el sufrimiento económico».
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En tanto, el senador cubano-americano Bob Menéndez, que preside el comité de Exteriores del Senado de EE. UU., dejó claro, en declaraciones brindadas a medios de comunicación que «no habrá una intervención militar en Cuba».
El senador sale al paso de la trillada teoría del régimen cubano que intenta justificar la represión convenciendo a los cubanos que son víctimas de una conspiración norteamericana que terminaría con una intervención y militar.
«No vamos a tener una intervención militar en Cuba. (…) No lo ha hecho ninguna administración, ni republicana, ni los más anticomunistas. (Ronald) Reagan, (George W.) Bush y hasta la política de (Donald) Trump. Nadie ha considerado eso», dijo el influyente senador demócrata.
El mismo patrón de represión de todos estos regímenes que dicen ellos defender a su pueblo pero los echos hablan lo que verdaderamente son.