La delegación de la Colación Nacional (CN) que se dirigía al municipio de San Fernando, en el departamento de Nueva Segovia, para realizar su reunión organizativa en esa localidad del norte de Nicaragua, fue obligada a regresarse hacia Managua por un numeroso dispositivo policial que les bloqueó el paso en la entrada a Ocotal y de esa manera impedir que la agrupación política organizara sus juntas directivas en esa zona, al norte del país.
Un equipo periodístico de Artículo 66 que viajaba dando cobertura a la caravana de vehículos de los opositores constató el desproporcional despliegue policial en las cercanías del puente El Chaparral, localizado en la entrada de la Ciudad de Ocotal, a 168 kilómetros de Managua y a solo 25 kilómetros de San Fernando, lugar donde se realizaría la reunión organizativa de la CN.
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En la Caravana se movilizaban Medardo Mairena, dirigente del Movimiento Campesino (MC), y el presidente de la agrupación Fuerza Democrática Nicaragüense (FDN) y ex comandante de la Resistencia Nicaragüense en la guerra de los años 80, Luis Fley. La Policía del régimen Ortega-Murillo desplegó un contingente de más de cien efectivos armados para bloquear el paso de los cuatro vehículos en las que se transportaban los opositores.

Las fuerzas policiales estaba integradas por aproximadamente 70 efectivos de las tropas especiales antidisturbios, unos 30 agentes de tránsito y seguridad pública y al menos una decena de elementos vestidos de civil que bien podrían ser policías o paramilitares.
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Un oficial de los antimotines ordenó a los ocupantes de los vehículos que le entregaran todos sus documentos y luego les dijo que no podían pasar de ese lugar por lo que tenían que regresarse hacia Managua, sin dar mayores explicaciones, mientras los antimotines bloqueaban la carretera. Los documentos de los opositores, como cédulas de identidad, licencias y cualquier otra identificación, fueron decomisados.
«No nos dejaron pasar. Es lamentable y condenable que sigan violando nuestros derechos humanos. El régimen dictatorial no cesa la represión y no permite que podamos organizarnos. Que la comunidad internacional sepa que no hay libertad de expresión en Nicaragua, no hay libertad organización, ni libertad de movilización. Vamos a continuar en esta lucha, vamos a continuar en resistencia», dijo Medardo Mairena a Artículo 66 mientras regresaba hacia Managua.
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‹‹No nos sentimos derrotados, somos personas civiles, no andamos buscando problemas, somos civiles, andamos ejerciendo nuestro derechos constitucional que queremos organizarnos. No vamos a doblegarnos, somos nicaragüenses y este países nos pertenece también. Vamos a continuar organizándonos. No le tenemos miedo al régimen. El pueblo demanda organizarnos, el pueblo quiere la democracia y vamos a utilizar diferentes métodos para organizarnos, pero insisto, no vamos a dejar de organizarnos por la democracia en Nicaragua», finalizó Mairena.