Rosario Murillo, vocera del régimen de Nicaragua, anunció en su monólogo de este viernes, cuatro de septiembre de 2020, a los mandos policiales que Daniel Ortega ascenderá a comisionados generales en el acto del 41 aniversario de fundación de esa institución que señaló se celebrará el próximo nueve de septiembre.
Entre esas figuran que mencionó la vicedictadora está el comisionado sancionado por los Estados Unidos Juan Valle Valle y el jefe policial del departamento de León, Fidel Domínguez, ambos señalados de forma parte del círculo más cercano de la pareja presidencial designados para reprimir a los nicaragüenses que se levantaron en contra de la administración Ortega-Murillo desde abril de 2018.
«En la semana de la patria ¡cuánta conmemoración! Vamos al 41 aniversario de nuestra Policía Nacional ¡Honor y gloria! La Policía Nacional que atiende a las familias, a las personas la dignidad de nosotras las mujeres (…) Queremos felicitar a los nuevos comisionados generales que recibirán su ascenso de grado del presidente de la República y jefe supremo de la Policía en ese acto. A la comisionada mayor, futura comisionada general Carlota del Socorro Espinoza Aragón; al comisionado Suban Antonio Yuri Valle Olivares, al comisionado mayor Pedro José Rodríguez Argueta, al comisionado mayor Fidel de Jesús Domínguez Álvarez, al comisionado mayor Clifford Alberto Domínguez Pérez, al comisionado mayor Juan Antonio Valle Valle y al comisionado mayor Julio César Sánchez Reynosa; todos ellos recibirán sus grados de comisionados generales el próximo nueve en el acto de conmemoración.Serán ascendidos también 1,200 compañeros en todas las unidades policiales del país», detalló Murillo.
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El comisionado Juan Valle Valle, jefe de la Dirección de Vigilancia y Patrullaje de Managua, fue incluido el cinco de marzo en la lista de sancionados por el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos. Ese funcionario en múltiples ocasione ha sido visto con un fusil AK al hombro dirigiendo los operativos represivos contra los ciudadanos que intentan manifestarse pacíficamente.
Comisionado Juan Valle Valle, otro de los que será ascendido
Valle Valle, incluso estaba cerca de la rotonda de Metrocentro el tres de septiembre de 2015, cuando un sujeto identificado después como Samir Matamoros, identificado como «el pistolero» de Metrocentro, atacó a balazos una manifestación opositora en los llamados «miércoles de protesta». Valle Valle fue increpado por periodistas por la falta de actuación policial, pero dijo que «no vio nada».
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Mientras el comisionado Fidel Domínguez Álvarez, otro de los que será ascendido, funge como jefe policial en el departamento de León desde el 23 de agosto de 2018, cuando el país sufría con intensidad la represión ejecutada por Daniel Ortega y Rosario Murillo. Tras su investidura, la institución orientó a Domínguez reprimir a los opositores leoneses con el argumento que «las familias de León debían regresar a vivir en la seguridad que teníamos antes del 18 de abril».
El comisionado Fidel Domínguez Álvarez fue nombrado jefe policial en el departamento de León el 23 de agosto de 2018, cuando el país sufría con intensidad la represión ejecutada por Daniel Ortega y Rosario Murillo. Tras su investidura, la institución orientó a Domínguez reprimir a los opositores leoneses con el argumento que «las familias de León regresen a vivir en la seguridad que teníamos antes del 18 de abril».
La también primera dama dijo sentirse orgullosa por la labor que han realizado los que serán ascendidos y resaltó que la mayoría de la lista han sido fundadores de la institución. En esa misma línea, Murillo alabó la labor de la Policía y afirmó que esa institución ha retomados «programas para los jóvenes, sobre todo para los jóvenes que estaban en riesgo por tanto abandono. Llegamos al Gobierno en 2007 a retomar todos los programas para que la patria camine con esperanza cierta».
También se autofelicitó por «todos los relanzamientos de la Comisaría de la Mujer, siempre acudiendo al llamado de las familias», pese a que su mismo régimen decidió cerrarlas y después apostó por reabrirlas, pero eso no ha frenado las denuncias de centenares de mujeres que afirman que en esas instancias ni siquiera atienden sus denuncias y en el caso de los femicidios insisten en que la mayoría de los casos siguen en la impunidad, por la misma protección del Estado a los victimarios.