Después de las múltiples agresiones que vivieron al menos 11 periodistas independientes que daban cobertura a las protestas que se realizaron este martes en varios puntos de la capital, para exigir la libertad de los reos políticos; la organización Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua (PCIN) condenó las acciones represivas y aseguró que va a proceder de manera legal contra la Policía orteguista para que se aplique la ley contra los que han violado el derecho a la libertad de expresión y de prensa.
Siempre en ese mismo tema el Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP) condenó la agresión a diferentes comunicadores sociales, quienes fueron empujados, insultados y golpeados por los uniformados al momento que daban cobertura a los plantones de opositores.
Protestamos por las violaciones a los derechos de los nicaragüenses, que seguimos siendo amenazados, intimidados, acosados y reprimidos. Condenamos la invasión a la propiedad privada ocurrida en Metrocentro y la agresión a los comunicadores que realizaban su trabajo periodístico. pic.twitter.com/EurmrSPkl6
— COSEP Nicaragua (@COSEPNicaragua) February 25, 2020
El Gran Capital además denunció la invasión por parte de la Policía orteguista al centro comercial Metrocentro, en Managua. Ante todos estos ataques, el gremio demanda a las instituciones y autoridades del Estado a «respetar los derechos constitucionales de todos los nicaragüenses».
En otras noticias. Un mes después de la masacre ocurrida en la comunidad Alal, del territorio Mayangna Sauni, en el municipio de Bonanza, en el Caribe Norte de Nicaragua, dos líderes indígenas viajaron hasta Managua para reclamar justicia por los cuatro asesinados a manos de colonos y exigir a la dictadura de Daniel Ortega inicie una investigación al respecto.
El líder indígena Pedro Justo Jacobo y el reverendo comunitario Obando Castillo relataron las condiciones que están atravesando los comunitarios después del ataque recibido por civiles. Además denuncian que sus comunidades mueren de hambre porque no pueden salir de sus casas, ni cosechar, ni trabajar ante las constantes amenazas de invasores colonos.
En la última visita que tuvo el preso político José Santos Sánchez, originario de Masaya, en el Sistema Penitenciario Jorge Navarro, les manifestó a sus familiares que continúa mal de salud y que en la consulta que recibió el miércoles, 19 de febrero, el médico le detalló que urge una operación en su nariz. Su familia cree que la condición del reo es por la golpiza que recibió por agentes policiales en febrero de 2019 cuando fue capturado por primera vez.
El 12 de marzo se realizará una audiencia preparatoria y el 20 del mismo mes será el juicio oral y público, donde a dictadura lo acusa por el delito de tráfico de drogas.
En el ámbito religioso. Después del ataque violento del que fue víctima el monaguillo del templo San Felipe en Molagüina, en el departamento de Matagalpa, mientras defendía a la secretaria de la iglesia, por el ataque de varios militantes orteguistas; el sacerdote Róger García se mostró indignado y condenó el acto que puso en riesgo la vida de sus colaboradores.
El religioso destacó que Daniel Ortega y Rosario Murillo son “zorros del mismo piñal” que han venido con ideologías extranjeras de Rusia y Cuba, porque no tuvieron buen resultado en esos países. Para el religioso, la familia Ortega-Murillo quiere mantenerse en el poder y heredarlo a sus hijos, a quienes etiquetó como un “atajo de zánganos”. La Diócesis de Matagalpa de igual manera condenó el atentado y exigió respeto a los templos católicos.