La socióloga y experta en temas de seguridad Elvira Cuadra realizó un monitoreo sobre los asesinatos ejecutados contra campesinos en las montañas de Nicaragua, entre octubre de 2018 y julio de 2019. El informe recoge un total de 29 ejecuciones contra campesinos, los que, según Cuadra, fueron aniquilados a balazos por policías y paramilitares de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
El informe recoge que de los 29 crímenes, 21 estuvieron relacionados directamente con la situación política y 8 por razones vinculadas con delincuencia común. Sin embargo, aun estos ocho crímenes, aparentemente comunes,”testigos o familiares señalan como hechores a policías y paramilitares”. El estudio revela que la mayoría de asesinatos se cometieron con armas de fuego.
“El estudio fue realizado mediante información pública que están en los medios de comunicación, nosotros verificamos que sea un medio de comunicación serio y creíble. Este documento representa un avance de un estudio que todavía está en curso, no está concluido todavía y se facilitó porque había una preocupación con respecto a este tema y era necesario que se vieran algunos datos”, señaló Elvira Cuadra.
Los asesinatos registrados en los últimos meses han ocurrido en la zona norte del país. Jinotega es el departamento con más personas asesinadas con 20 víctimas mortales, seguido de Matagalpa. “En algunos de los casos se observa que los asesinatos son cometidos por grupos de más de dos personas que utilizan motos o camionetas para movilizarse”.
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“Indudablemente el incremento de la violencia y la inseguridad en todo el país son una
consecuencia directa de la crisis por varias razones; porque la Policía ha dejado de atender sus funciones y misiones ordinarias para dedicarse a las acciones de represión; porque el gobierno ha alentado y facilitado la conformación, actuación y la impunidad de los grupos paramilitares integrados por simpatizantes fanatizados, y porque hay una clara política de criminalización, persecución, vigilancia y agresiones a líderes sociales, especialmente prisioneros políticos excarcelados y aquellos que están en las zonas rurales”, expresa la socióloga en su informe.
Tres campesinos asesinados en Honduras
Entre junio y julio de 2019 se registraron los últimos asesinatos contra campesinos. Se trata de tres líderes campesinos, originarios de Jinotega, considerados críticos de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo. Estos fueron asesinados en circunstancias aún no esclarecidas en las zonas fronterizas de Honduras con Nicaragua. Los tres ciudadanos se encontraban exiliados en el vecino país por las amenazas de muerte y el grado de represión que ejerce el régimen orteguista.
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El 27 de junio fueron asesinados los campesinos Edgar Montenegro Centeno y su hijo Yalmar Montenegro Olivas en el municipio Los Trejos, El Paraíso Honduras, ubicada en la zona fronteriza con Nicaragua. En las mismas circunstancias fue asesinado el campesino Francisco Sobalvarro, originario de Jinotega, el crimen se perpetró el pasado 13 de julio, en la casa donde habitaba junto a su familia en el municipio de Trojes, departamento de El Paraíso, Honduras.
“Cifra es alarmante”
La presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH), Vilma Nuñez, afirmó que esta cifra es alarmante, y que este patrón de asesinatos selectivos contra campesinos ocurren desde antes de la crisis sociopolítica que vive Nicaragua.
“Yo pienso que pudo haber tenido la misma motivación que tuvo en el pasado, antes del 18 de abril, que era precisamente exterminar a los grupos que ya demostraban algún nivel de inconformidad. Es verdaderamente alarmante esta cifra, porque han habido repuntes de gente que han ido a matar hasta Honduras.
La defensora de derechos humanos señaló que como organización están trabajando para corroborar esta información y realizar una investigación explicita. “En este momento estamos iniciando pasos para comprobar, tenemos algunas listas de nombres pero no comprobaciones, hay algunos que son evidentes como por ejemplo el asesinato de la familia Montenegro, asesinada en Honduras”.
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Por su parte el líder campesino y exreo político de la dictadura Medardo Mairena afirmó que los últimos asesinatos han sido de manera selectiva por parte del régimen, pero que la persecución contra los campesinos ha sido desde tiempo atrás.
“El régimen no desde ahorita les da persecución a los campesinos, siempre ha estado asesinando, desde hace mucho rato. Esto fue algo que nosotros denunciamos públicamente. Esta es una realidad que los últimos asesinatos ha sido de manera selectiva por parte del gobierno”, afirmó Mairena.
