En una reciente con conferencia sobre Estado de Derecho y Crecimiento económico auspiciada por el NCSC (Nacional Center State Courts) por sus siglas en inglés, o El Centro Nacional para Tribunales Estatales, la economista Sally Mayer con palabras bien sencillas nos explicó que tipo de estrategias macroeconómicas se deben tomar en tiempo de crisis.
Antes de explicar más a fondo sobre sus recomendaciones, debo confesar que mis conocimientos sobre economía se resumen en las compras que hago en el mercado cada 15 días. Es decir que vivo como la mayoría de los nicaragüenses, coyol quebrado coyol comido.
Al inicio del evento hubo unas palabras de bienvenida por el Licenciado Giovanni Campos, representante del NCSC en Nicaragua. El marcaba como principal objetivo de las conferencias el fortalecimiento de conocimientos en los temas del evento, el Estado de Derecho y el Crecimiento Económico. El lic. Campos recalcaba que ambos temas están íntimamente relacionados y que un país debe exigir democracia, no pedirla.
Nicaragua ha sufrido fracturas graves en su estado de derecho, a consecuencia de eso se generan crisis económicas como la que estamos viviendo actualmente. Según datos oficiales la recaudación tributaria en los primeros meses de este año se redujo en más del 12% y de igual manera el gasto del capital se redujo en más del 40%.
La economista Sally Mayer dijo en su conferencia que hay muchos factores que influyen la crisis económica, pero que definitivamente la ruptura del Estado de Derecho influyó directamente en el agravamiento de la crisis. Esa ruptura genera informidad social, violencia, represión, revoluciones, lo cual se traduce en menos inversión, menor consumo, menos prestamos de los bancos, menos gasto social, es decir; pobreza.
Mayer mencionaba que cuando un país se encuentra en crisis económica es imperativo voltear los ojos a la realidad política, en el caso especifico de Nicaragua, la crisis económica es una consecuencia directa de un problema político.
Las estrategias macroeconómicas deberían de ir enfocadas en restaurar la confianza, incentivar el consumo, la inversión, bajar impuestos, en otras palabras es implementar medidas expansivas y no contractivas.
El Gobierno de Nicaragua en su afán por recaudar dinero de cualquier forma, implementó unas reformas fiscales brutales y sin sentido. La economía del gallo pinto como se llamó popularmente afectó a los más pobres, afectó a la mayoría de nicaragüenses que pasaron de comer filete de pollo a beber sopa de chincaca.
Mayer finalizó la conferencia con un cuadro comparativo con las estrategias que se deben de implementar en una crisis económica y las estrategias que no se deben implementar, no fue asombro de nadie ver que el régimen orteguista implementó todas las que no se deben aplicar. Una vez más se comprueba la ineficiencia e inaptitud del gobierno para manejar este país.
“Para resolver el problema económico hay que resolver el problema político, no se puede separar una cosa de la otra, la confianza es la clave” dijo Mayer
Tomando en cuenta esas palabras vale la pena preguntarse: ¿Quién confía en un gobierno que lo que menos tiene es voluntad política para cambiar la situación actual? La economía de la chincaca es una realidad y quizás mañana sea peor, sea sin el “chin”.