La tarde de este jueves, 29 de noviembre, el catedrático Mauricio Álvarez fue secuestrado junto a su esposa René Patricia Madriz y su hijo Mauricio José Álvarez Madriz de 24 años, de su casa, ubicada en reparto de Fátima, en León.
Álvarez fue despedido de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN, León), el jueves, ocho de noviembre, sin una justificación por parte de las autoridades universitarias. El catedrático ha criticado y cuestionado las acciones de la dictadura de Ortega contra los estudiantes que han protestado desde el 18 de abril.
Durante su secuestro fue golpeado y amenazado si seguía hablando contra el dictador Ortega; además le robaron su celular.
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“usted está hablando chochadas con su hermano (Gabriel Álvarez, abogado constitucionalista) y queremos que dejen de hablar inmediatamente. Si siguen ustedes opinando van a sufrir las consecuencias de lo que estén haciendo”, narró Álvarez, que lo amenazaron los policías y paramilitares que lo secuestraron. El académico recordó que en ningún momento ha violentado las leyes para justificar su detención y la de su familia.
Por otro lado, el catedrático aseguro que esta es una represalia porque ha sido independiente en su forma de pensar.
Hasta octubre se reportaban más de 60 docentes despedidos de universidades y colegios públicos de primaria y secundaria, todos habían participado en manifestaciones azul y blanco que le demandan al régimen de Daniel Ortega paz, justicia, libertad y democracia.