El dictador de Nicaragua, Daniel Ortega, fustigó el lunes al primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, por la guerra en Gaza. Ortega calificó al alto cargo judío como «hijo del demonio».
Ortega arremetió contra el gobernante israelí en un acto por el 45 aniversario de la policía nicaragüense, tres días después de que Managua anunciara la ruptura de relaciones diplomáticas con el Estado hebreo.
«Al frente del gobierno de Israel se encuentra un primer ministro que es hijo del demonio ¿Por qué? Porque lleva en la práctica una política de terror y es (Adolfo) Hitler», el exdictador de la Alemania Nazi (1933-1945), dijo Ortega en su discurso.
«El primer ministro de Israel es Hitler […], igual que el que preside Ucrania (Volodimir Zelenski, que) es otro nazi hijo de Hitler», agregó el jefe de la dictadura sandinista.
A la ceremonia asistieron su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, funcionarios del gobierno, uniformados y varios diplomáticos extranjeros.
Ortega también agradeció la cooperación de China y Rusia, países con los que ha estrechado lazos en los últimos años, e incluso entregó una condecoración por la «amistad policial» a un alto funcionario chino.
El viernes, Nicaragua anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con Israel, país al que Ortega venía fustigando por su guerra contra el movimiento islamista palestino Hamás en Gaza.
«Nuestro Presidente ha instruido a la Cancillería de la República a acatar esa solicitud del Parlamento Nacional y a proceder a la ruptura de las relaciones diplomáticas con el gobierno fascista y genocida de Israel», dijo la vicepresidenta de Nicaragua y primera dama, Rosario Murillo, al anunciar el quiebre de los lazos diplomáticos.
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Esta decisión fue mayormente simbólica, pues los intercambios entre ambos países son casi inexistentes e Israel no tenía un embajador residente en Managua, y según el decreto oficial, el embajador que tenía Nicaragua ante el gobierno israelí, ejercía en calidad de concurrente, desde Managua.
Israel y Nicaragua habían restablecido relaciones diplomáticas el 28 de marzo de 2017, luego de que Ortega rompiera los lazos en 2010.
Managua también había cortado los lazos diplomáticos con Israel en 1982, durante el gobierno sandinista encabezado por Ortega tras la toma del poder del movimiento guerrillero revolucionario de 1979 y el derrocamiento del dictador Anastasio Somoza.
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Con información de AFP.