El comentarista político nicaragüense, excarcelado político y desterrado a Estados Unidos, Jaime Arellano, considera que la derecha en Nicaragua debe «unirse» porque «es importantísimo que haya un bloque unido de la derecha para que haya un mensaje cohesionado y coordinado de los sectores de derecha».
El excarcelado dijo en el programa En Contacto con el periodista Álvaro Navarro, director de Artículo 66, que la izquierda en Nicaragua ya se unió (en referencia a los grupos nacidos al furor de las protestas sociales) y que han trabajado coordinadamente.
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«(La izquierda) se unió y ha trabajado coordinadamente, cometiendo siempre unos errores que considero siguen cometiendo. La derecha debe hacerlo, debe unirse. Buscar la manera de coordinarnos con la oposición existente que hay en Nicaragua», dijo Arellano.
El político propone que se cree un bloque de izquierda y uno de derecha; que en un momento dado va a tener que haber una coordinación para empujar acciones conjuntas para «sacar a Daniel Ortega. Hay que buscar el mecanismo para definir y resolver porque la comunidad donante se ha cansado». Que cada bloque elija a sus «directivos» para trabajar en coordinación y que no sean elegibles para cargos públicos cuando Nicaragua sea libre.
«Los que tenemos la misma ideología debemos unirnos, establecer estrategias y, después en algún momento, ver la manera de cómo coordinamos con otros sectores una estrategia en común para la liberación de Nicaragua», manifestó.
El desterrado afirmó que mucha gente cree que la oposición en Nicaragua ya no existe y «eso es un gravísimo error, porque en Nicaragua hay liderazgos con opositores buenos, jóvenes, hay otros con experiencia, lo que pasa es que no pueden hacer la lucha abierta, como nosotros (los desterrados) que tuvimos la oportunidad hasta que caímos presos».
Arellano cree que el error que han cometido los grupos de oposición es que todas las alianzas que se han hecho son «alianzas electorales y lo que debe de haber, no es una alianza electoral».
El opositor aseguró que hay muchos grupos que se han autodenominado los representantes o líderes de la oposición cuando nadie los ha elegido o nadie los ha nombrado. «Jamás voy a arrogarme que yo soy liderazgo de la oposición», remarcó.
La oposición nicaragüense ha intentado varias veces unirse en un solo bloque, pero los diversos grupos abandonan los espacios. La Unidad Nacional Azul y Blanco (Unab), la Coalición Nacional (CN), Monteverde y otros espacios políticos han sido los fracasos de los opositores que no logran acuerdos en conjunto para presentar a la comunidad internacional un solo bloque para llevar esperanza y democracia a Nicaragua.