El observatorio ciudadano Urnas Abiertas (UA) informó, este lunes, 30 de enero, que el promedio de abstencionismo en las elecciones regionales fue de 55%, durante los procesos electorales celebrados en las regiones de la Costa Caribe Norte y Sur de Nicaragua, entre 1998 y 2016.
De acuerdo con un informe publicado en sus redes sociales, la agrupación independiente expuso que el nivel de participación de los caribeños es «más bajo que el que se registra para el resto de elecciones». Agregan que, para ambas regiones costeñas, «el porcentaje de participación ha venido decreciendo desde un 78.45%, en 1990, hasta un 34.88%, en 2019».
Las razones detrás de la abstención
De igual manera, Urnas Abiertas destacó que hay múltiples razones detrás de esta alta tasa de abstención entre los pobladores de la Costa Caribe, entre ellas figura el pacto entre Arnoldo Alemán y Daniel Ortega, realizado en 1998. «Aquí se reformó la ley electoral para favorecer al FSLN (Frente Sandinista de Liberación Nacional) y el PLC (Partido Liberal Constitucionalista) y los otros grandes partidos nacionales», denunció.
El centro de investigación agregó que este cambio legal también «dificultó la participación política de los actores regionales, ya que ‘puso fin a la posibilidad de grupos o partidos locales de postularse a la Presidencia’». Igualmente, UA manifestó que esto «ha sido parte de una política que inició en 1996 y que se ha reforzado en los últimos años, la cual fomenta que los líderes políticos en Managua hayan impuesto paulatinamente su control sobre la política costeña».
El organismo señaló que otra posible razón que motiva a los ciudadanos a no votar es «la decepción de la población ante la falta de institucionalidad y viabilidad, tanto de la Ley 28 (Ley de Autonomía) como de la Ley 445 (Ley de Régimen de Propiedad Comunal de los Pueblos Indígenas y Comunidades Étnicas)».
«Con respecto a la Ley 445, lo más preocupante ha sido el apoyo tácito en los últimos años del Gobierno, liderado por el FSLN, en aprobar títulos fraudulentos de propiedad y el despojo de tierras a favor de colonos o empresas extractivistas», detalla el comunicado.
Urnas Abiertas indicó que «en vez del saneamiento prometido por la ley, desde el 2009, las poblaciones del Caribe han sido testigos de la rápida deforestación llevada a cabo por ALBA Forestal (empresa financiada con la cooperación venezolana, privatizada por el FSLN) y otras empresas». Del mismo modo, el organismo señaló que «esta deforestación ha alcanzado, incluso, a la reserva de Bosawás».
La organización reitera que, desde 1998, «la intromisión del Gobierno central ha mermado la autonomía de las poblaciones indígenas y afrodescendientes, haciendo que las poblaciones locales pierdan espacios de participación política».
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Un llamado a «no votar»
En este mismo contexto de irregularidades en el proceso legal, el partido político indígena Yapti Tasba Masraka Nanih Asla Takanka (Yatama) invitó, por medio de sus redes sociales, a las comunidades de los 23 territorios pertenecientes a las regiones de la Costa Caribe Norte y Sur de Nicaragua, a no formar parte de las próximas elecciones regionales, que están programadas para el próximo tres de marzo de 2024.
Los integrantes de Yatama denunciaron que la dictadura orteguista ha implementado diversas «campañas sociales», donde «recurren a la movilización de médicos en grandes caravanas con medicamentos para nuestra gente». «Hemos verificado que estas afirmaciones son falsas. Todo es campaña para que tú, que lees este mensaje, vayas a votar o legitimar con tu presencia», manifestaron.
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Yatama expuso que el gobierno sandinista prometió a los locales «mejoras sociales», pero que «son las mismas de siempre». «Prometieron construir carreteras de otras zonas como Sahsa, comunidad donde vive el 70% de colonos», manifestó la organización política.
De igual manera, el organismo indígena resaltó que estas «promesas» del régimen nicaragüense parecen ser «estrategias para ganar votos». «Hasta el momento, no se ha concretado ninguna acción significativa en beneficio de nuestras comunidades desde que el gobierno del FSLN (Frente Sandinista de Liberación Nacional) está en el poder», indicó Yatama.