La Policía al servicio de Daniel Ortega y Rosario Murillo finalmente se refirió a Martín Argüello Leiva y a Bernardo Martín Argüello Celebertti, esposo e hijo, respectivamente, de la directora de la organización Miss Nicaragua, Karen Celebertti, a quienes tenía desaparecidos desde hacía varios días.
A través de una nota de ocho páginas, publicada en los medios de propaganda oficialistas, y bajo el título de «Conspiración anti-patria», la Policía hace una serie de acusaciones contra Martín Argüello Leiva, Bernardo Martín Argüello Celebertti y contra la misma Karen Celebertti, propietaria de la franquicia de Miss Nicaragua y una de las responsables de la coronación como Miss Universo 2023 de la joven nicaragüense Sheynnis Palacios.
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En nota policial fechada el primero de diciembre de 2023, la institución represiva afirma que «desde el 2019, los señores Karen Celebertti, Martín Argüello Leiva y Bernardo Martín Argüello Celebertti permanecieron en comunicación con exponentes de la traición a la patria, disponiéndose a utilizar sus franquicias, plataformas y espacios supuestamente dedicados a promover “inocentes” concursos de belleza, en una conspiración que ha trabajado orquestadamente para convertir los certámenes en trampas y emboscadas políticas, financiadas por agentes extranjeros, entre personas y organismos bien conocidos».
Agregan, como intentando darle credibilidad a su afirmación, que «todo lo anterior consta en las memorias telefónicas y tecnológicas encontradas en poder de los mencionados personajes».
En resumen, la Policía estaría acusando, al menos por lo que se lee en esta nota, a los tres miembros de la familia Argüello Celebertti de los delitos de: Conspiración, traición a la patria, incitación al odio, la violencia y crimen organizado; provocación, apología e inducción a la comisión de delitos a través de las tecnologías de comunicación e información, y propagación de noticias falsas a través de las tecnologías de comunicación (Ciberdelitos); delitos contra el lavado de activos, financiamiento al terrorismo y financiamiento a la proliferación de armas de destrucción masiva, y además de ser agentes extranjeros.
La Asamblea Nacional, controlada en su totalidad por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, aprobó el 30 de noviembre una nueva iniciativa llamada oficialmente Ley de Reformas y Adición a la Ley 89, Ley de Autonomía de las Instituciones de Educación Superior y de Reformas a la Ley 582, Ley General de la Educación. Con estos nuevos cambios, aprobados por 91 diputados, el Consejo Nacional de Universidades (CNU) tendrá un poder total para nombrar a rectores, vicerrectores y secretarios de las universidades públicas del país.
La reforma también implica la disolución de agrupaciones internas como la Asamblea General Universitaria, el Consejo de Facultad y el Consejo Universitario, debido a que en el artículo cuarto de la nueva ley reformada, se autorizó la derogación de los artículos 16, 29 y 30.
En su lugar, se creó el Consejo de Dirección que se encargará de enviar propuestas al CNU como «el nombramientos de autoridades en todos los niveles, el presupuesto general de gastos e ingresos de la universidad, la creación, modificación o supresión de carreras y los planes de estudio».
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Otro cambio que destacó entre este «aplastamiento» a la autonomía universitaria fue la abolición completa de los decanos, quienes representaban la «máxima autoridad académica y ejecutiva de la respectiva facultad» y la representaban «en sus relaciones con las otras autoridades y los particulares», según el artículo 34 de la Ley 89, aprobada en 1990. Ahora, el régimen impuso a los «directores por área de conocimiento», que además de atender las mismas obligaciones que los decanos, «deberán cumplir y hacer cumplir las resoluciones del Consejo de Dirección».
El Estado de Nicaragua representado por el canciller Denis Moncada participó en el «Foro Internacional contra el Imperialismo, el fascismo y la neocolonización en el Marco de los 200 Años de Antiimperialismo “Bolívar Vs. Monroe”» y condenó las «actitudes injerencistas» de países como Estados Unidos. Este foro se llevó a cabo el primero de diciembre del 2023 en Caracas, Venezuela, el otro país gobernado por otra dictadura de pseudo-izquierda.
Durante la conferencia, el canciller declaró que «el imperialismo, fascismo y el neocolonialismo continúan de forma permanente con políticas criminales, inhumanas y el robo descarado de los recursos naturales».
Moncada consideró que la más reciente víctima de esta neocolonización salvaje fue «el pueblo palestino en Gaza» y condenó no solo el accionar de Israel, sino que «también la ocupación del imperialismo mundial», haciendo una apología total del terrorismo del grupo Hamas, que ha sembrado muerte y dolor en la frontera palestino-israelí.
En otro intento por mostrarse «simpático» con los dictadores amigos de sus jefes de Managua, Moncada elogió «la convicción» de Cuba y Venezuela de salir de la Organización de Estados Americanos (OEA). «Nosotros nos desvinculamos este 19 de noviembre de la misma organización. La OEA es el instrumento del poder norteamericano para implementar su doctrina Monroe en América y en todo el mundo.
Nicaragua ya no es miembro de esta organización subordinada al imperio norteamericano y contribuimos así en esta lucha contra el imperialismo, el fascismo, la neocolonización y por un nuevo orden internacional que sea justo equitativo, respetuoso y multipolar», dijo, visiblemente emocionado el canciller nicaragüense para mostrarse en sintonía con el discurso estridente contra Estados Unidos que se repite desde hace 60 años en la cúpula del gobierno cubano.