El nicaragüense Erling Ezequiel Toruño Espinoza, de 41 años, ha sido hallado culpable del femicidio de su pareja Fanny Altamirano Flores y se encuentra frente a una sentencia que podría condenarlo a 25 años de cárcel, por la jueza de Distrito Penal Especializada en Violencia de León, Wendy Balladares.
En este mismo veredicto, la jueza Balladares absolvió a Erling Toruño de los cargos de parricidio en grado de tentativa en perjuicio de sus dos hijas, que en ese momento tenían 4 y 6 años, así como del cargo de portación ilegal de armas.
El fallo no lo declaró culpable de parricidio en grado de tentativa debido a que los investigadores no entrevistaron a la hija de 6 años, lo que impedía incorporar su testimonio como prueba en el juicio. El femicida tampoco fue culpado por portación ilegal de armas, ya que no se encontró el arma utilizada.
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El agresor, capturado por la Policía Internacional (Interpol) hace seis meses en Estados Unidos, le arrebató la vida a su pareja con cuatro disparos en la noche del 10 de enero de 2014 en El Jicaral, en el departamento de León. En ese fatídico momento, sus dos hijas, de 4 y 6 años, fueron testigos del acto y también objeto de su intento de homicidio, el cual no se consumó debido a que se quedó sin municiones, según la acusación fiscal.
La sentencia de culpabilidad contra Erling Toruño fue sustentada por el testimonio de Eloy Trujillo Flores, quien auxilió a la víctima la noche del suceso. Trujillo relató ante la jueza que escuchó cinco disparos y al llegar a la vivienda encontró a Fanny Altamirano fallecida, boca arriba y bajo un árbol de jícaro.
En el transcurso del juicio, la defensa de Erling Toruño argumentó que su cliente le quitó la vida a Fanny Altamirano en respuesta a una “agresión ilegítima” la noche del 10 de enero de 2014, esgrimiendo así la legítima defensa como justificación. Sin embargo, este argumento fue desestimado por la jueza Wendy Balladares, quien expresó en su fallo de culpabilidad que nada puede justificar este crimen.
La defensa de Erling Toruño solicitó a la autoridad judicial una pena mínima de 20 años de prisión para su defendido, en contraposición a la solicitud de larga condena planteada por la Fiscalía.
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Familia cómplice
Después de cometer el crimen, el hombre abandonó la casa y se fue en una motocicleta acompañado de su primo Saúl Centeno Toruño a comprar un boleto de bus para viajar a Costa Rica.
A su primo lo acusaron de cómplice, pero solo pagó 7 meses de prisión, de los 8 que le habían impuesto.
Entre enero y septiembre de 2023, el Observatorio Voces, de la organización feminista Católicas por el Derecho a Decidir (CDD), ha registrado que al menos 60 mujeres han sido víctimas de la violencia machista, 42 de los 60 femicidios se cometieron en el territorio nacional y 18 se perpetraron en el extranjero.