El padre Edwing Román, expárroco de la iglesia San Miguel Arcángel de Masaya, criticó el «afán» del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo por «desaparecer» a la Iglesia católica de Nicaragua.
«¿Y es que —los dictadores— Daniel Ortega y Rosario Murillo pretenden hacer desaparecer a la Iglesia católica que peregrina en Nicaragua?», cuestionó el religioso, a través de su cuenta de Twitter.
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Ante la ola represiva contra la institución religiosa, que arreció en 2022, Román calificó de «tontos» a los dictadores Ortega y Murillo, afirmando que «veremos pasar sus féretros enfrente de la Iglesia».
Citando el texto bíblico de San Mateo 16:18, y aludiendo a la la dictadura Ortega y Murillo, el sacerdote escribió que «los poderes del infierno no prevalecerán sobre ella».
Desde el exilio forzado que vive desde agosto del 2021, el padre Román no ha dejado de demandar el cese de la represión en contra de la Iglesia católica y la libertad de todas las personas presas políticos, en especial, de monseñor Rolando Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa y reo de conciencia desde agosto de 2022.
Luego del fallido intento de diálogo entre la oposición y el Gobierno de Nicaragua, en 2018, y donde la Iglesia católica fue mediadora, el dictador Daniel Ortega no ha dejado de atacar a los sacerdotes.
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Hasta la fecha, la administración orteguista mantiene tras las rejas al menos a cuarto sacerdotes; además ha desterrado y expulsado a más de 10 religiosos y religiosas.
También ha cerrado organizaciones de orden católico e impedido la libertad de culto. Además mantiene una acusación contra la Iglesia de supuesto delito de lavado de dinero, señalamiento que ha sido desmentido hasta por el propio cardenal Leopoldo Brenes y rechazado por organizamos de derechos humanos. Entre su más reciente acción represiva está la cancelación de los permisos de operar de la asociación Compañía de Jesús y el cierre de la Universidad Centroamericana, que funcionaba bajo la dirección de los jesuitas.