El Cardenal Leopoldo Brenes confirmó que el régimen de Daniel Ortega ordenó a sus alcaldías girar cobros de Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a templos católicos del país, aunque agregó que esos asuntos se han «solucionado».
«A algunas parroquias han llegado algunas notas (de cobro) pero luego se ha solucionado», declaró el religioso escuetamente. Esta es la primera vez que se conoce que los gobiernos locales, llegan a los templos a notificar el pago del impuestos.
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El régimen de Ortega, que controla las 153 comunas tras un remedo de elecciones municipales que carecen de legitimidad tanto nacional como internacional, ha emprendido una guerra feroz contra la iglesia Católica, ha secuestrado sacerdotes, los ha enjuiciado y condenado por cometer supuestos delitos comunes y políticos, en venganza porque la a iglesia Católica no ha callado las violaciones de derechos humanos de la dictadura contra sus ciudadanos.
Exentos, pero…
«Hay una norma donde (se establece que) las iglesias están exentas de pagar impuestos», explicó el alto jerarca sobre el tema del cobro de IBI a los templos.
A lo que se refiere el Cardenal Brenes es al Artículo No. 5 del Decreto Ejecutivo número 3-95, aprobado el 31 de enero de 1995, donde en el capítulo II se establece en una de sus partes que están exentos del pago de IBI… «el Estado y sus instituciones, entes autónomos, municipios, representaciones diplomáticas, sedes de organismos internacionales y las iglesias y confesiones religiosas, en cuanto a los templos y dependencias destinadas a fines religiosos, entidades las cuales no están sujetas a este impuesto».
Además, el Artículo No. 6 de esa misma normativa, ni siquiera obliga a los templos y dependencias destinadas a fines religiosos a presentar la declaración del IBI.
«A quienes les han llegado (los cobros), han hecho los trámites correspondientes», dijo Brenes. -¿Y les han resuelto positivamente?- se le consultó. «Correcto», respondió a secas el prelado, quien se encontraba este martes en la Catedral de Managua.
Un ataque más
No obstante, el cobro de IBI a los templos se agrega a una acción más del régimen contra la iglesia Católica nicaragüense, a la que Daniel Ortega y su partido acusa de «golpista», tras la crisis de 2018.
El pasado 27 de mayo, el gobierno de Daniel Ortega también ordenó congelar las cuentas bancarias de todas las parroquias, alegando supuestos indicios de «movimientos delictivos en las arcas de las diócesis católicas».
Asimismo, cinco sacerdotes y un obispo se mantienen detenidos en Nicaragua. En tanto, el exilio ha sido el mecanismo de protección del obispo auxiliar de Managua, Monseñor Silvio Báez y decenas de religiosos católicos.
Por: Voces Unidas.
