El ciudadano nicaragüense Avimael Amador Romero, de 34 años, falleció por impactos de bala la noche del seis de febrero en Costa Rica cuando intentaba asaltar una unidad de transporte que se dirigía de San Isidro de Heredia a la capital San José.
El director general de la Fuerza Pública de Costa Rica, Daniel Calderón, informó a través de medios locales que Amador tenía antecedentes por robo y que le había sido revocada su residencia en Costa Rica. Además, afirmó desconocer las razones por las cuales una vez que salió de la cárcel no fue expulsado a Nicaragua.
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Amador fue abatido a balazos en la parada de autobuses cuando trataba de huir de la escena del crimen, según el relato de otros pasajeros del autobús. El ciudadano presuntamente se había subido con un arma para robar en el bus.
La Dirección de Migración y Extranjería dio a conocer que Amador se encontraba en proceso administrativo de inicio de cancelación de su estatus migratorio, lo que conllevaba ubicarlo para notificarle ese proceso de cancelación, acción que no se pudo ejecutar al no estar ubicado por la institución.
El ciudadano tenía un largo historial de estancias en la cárcel por delitos contra la propiedad y tenencia ilegal de armas. Salió de prisión por última vez el 28 de noviembre del 2017 tras descontar una pena de 9 meses de cárcel.
En los casos anteriores sus penas fueron de tres, cuatro, y cinco meses por delitos relacionados con robos agravados y tenencia ilícita de armas, según informó el director de la Fuerza Pública costarricense.
Según los datos, el nicaragüense murió de un impacto de bala recibido en el tórax tras intercambiar disparos con un guarda de seguridad en un autobús, luego de intentar asaltar a los pasajeros que viajaban en la unidad de transporte. Una mujer de 49 años también perdió la vida por dos heridas de bala en el cuello.
