La presa política y defensora de derechos humanos Evelyn Pinto es sobreviviente de cáncer, padece de insuficiencia renal crónica, hipertensión y otras enfermedades, pero el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo le ha negado las revisiones periódicas que debe realizarse, denunció su hija Silvia Nadine Gutiérrez Pinto.
El pasado seis de enero, Evelyn Pinto cumplió un año y dos meses de ser presa política de la dictadura nicaragüense. En todo ese tiempo detenida no le han permitido atención médica especializada ni los exámenes que tiene que practicarle. Su familia está preocupada por su salud.
La rehén de conciencia está confinada en el Establecimiento Penitenciario Integral de Mujeres (EPIM), conocido como «La Esperanza». Tiene visitas regulares dos veces al mes y llamadas, con algunas restricciones, explicó su hija a Artículo 66.
«Aún no se le ha realizado el chequeo médico requerido para el control de sus enfermedades. Ella necesita realizarse exámenes periódicos al menos cada dos o tres meses», detalló Gutiérrez Pinto.
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«Durante el tiempo que lleva en prisión ha tenido dolencias musculares, calambres, crisis hipertensiva, síntomas COVID (sin confirmar ya que no le hicieron prueba), infección en vías respiratorias y alergias varias», añadió.
Por su condición de persona con insuficiencia renal crónica es «una bomba de tiempo», refirió su hija. «De forma silenciosa sus riñones pueden estar sufriendo daños irreversibles… Nosotros seguimos preocupados por su salud ya que siguen si realizarse los chequeos medicos», alertó.
La activista fue detenida el seis de noviembre de 2021, en la víspera de las elecciones presidenciales de ese año. Evelyn Pinto enfrenta una condena de ocho años de cárcel, más 500 días multa, además fue inhabilitada para ejercer cargos públicos. Fue acusada por los supuestos delitos de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional y propagación de noticias falsas.
En agosto de 2022 la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó medidas cautelares a la presa política de 63 años, luego de evaluar su situación y considerar que «se encuentra en situación de gravedad y urgencia».
El organismo considera que la integridad de Pinto se encuentra en «una situación de riesgo, teniendo en cuenta que los eventos de riesgo alegados persisten a la fecha y se consideran susceptibles de continuar exacerbándose».
