El periodista deportivo y opositor al régimen de Ortega René Guzmán, originario de la ciudad de Masaya, se exilió junto a su familia en Estados Unidos tras ser objeto de asedio y persecución por parte de la Policía de Nicaragua.
Tres citas policiales para una supuesta entrevista y vigilancia constante a su negocio de venta de comida fueron las causas para que Guzmán tomara la decisión de salir de Nicaragua.
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«Exiliarme era mi última opción, sin embargo, el cinco de octubre me llegó a mi casa la primera citatoria de la Policía de Masaya para que me presentara al día siguiente. Luego de consultar a algunas personas decidí no presentarme», explicó a Artículo 66 el cronista deportivo de 42 años.
Luego, el 11 del mismo mes, Guzmán recibió una segunda cita de la Policía, «pero como yo no me encontraba, no la dejaron. Al tener ya dos citas, le dije a mi esposa que nos teníamos que ir, no podía esperar que me agarraran y más que se acercaban las elecciones municipales».
«Yo salí de Nicaragua el 27 de octubre, ese mismo día llegó la última cita a mi casa. Gracias a Dios que desde un inicio proveyó y logré conseguir para poder salir con mis esposa y mis dos hijos», narró el periodista.
«Pasé todo el proceso de un migrante más»
Luego de salir de Nicaragua y pasar por Honduras, Guatemala y México, el también miembro de agrupaciones de la sociedad civil cruzó el seis de noviembre el río Bravo por Ciudad Juárez, entregándose a las autoridades migratorias estadounidenses por el Paso Texas.
Luego de estar detenido por un poco más de 24 horas, fue puesto en libertad el martes ocho, y actualmente se encuentra albergado en una iglesia evangélica donde se le brindó a él y a su familia ropa y alimentos. Este miércoles abordará un avión hacia una ciudad de Estados Unidos para reencontrarse con unos familiares.
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Ya aliviado, Guzmán contó todo el proceso para llegar a tierras norteamericanas. «Hice todo el proceso que pasan los ciudadanos que deciden salir de su país en busca de una mejor oportunidad o como en mi caso para proteger mi integridad física y la de mi familia», dijo.
Agregó que en la frontera entre Guatemala y México tuvo que abordar una lancha para cruzar junto a otro grupo de personas. «Esa fue una de las experiencias más escalofriantes y desgarradoras que he pasado; y eso se lo debo al comandante —el dictador Daniel Ortega— porque puse en riesgo la vida de mis hijos, de mi esposa».
Ya estando en la ciudad de San Pedro, tuvo que agilizar su estadía para poder pasar el país azteca. Confiesa que «gracias a Dios no tuvo ningún inconveniente en toda su travesía. «Gracias a Dios no tuve que pagar ni un solo peso Mexicano en ninguno de los retenes que pasamos».
A diferencia que los ciudadanos venezolanos, el periodista contó que no tuvo ningún inconveniente en Migración. «En mi caso y el de mi familia fue rápido el proceso, nos preguntaron de donde éramos, y nos dijeron que ya para pedir asilo era en la corte donde teníamos que presentar todas las pruebas que lleváramos, pero con los migrantes Venezuela, el proceso es muy diferente», explicó.
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Estando en Estados Unidos, René Guzmán dijo que realizará todas las gestiones para solicitar con pruebas su asilo político, ya que en Nicaragua no es garantía regresar.
Declarado non grato en estadios de beisbol
Antes de que arreciera el asedio en su contra, el periodista fue expulsado en abril de 2021 de la cabina de transmisión del Estadio Roberto Clemente de Masaya, donde narraba los partidos de primera división. La razón que le dieron en ese momento los directivos del equipo del San Fernando es que lo expulsaban por «golpista y terrorista».
«Llegaron dos directivos directamente a la cabina de transmisión (del Estadio Roberto Clemente) y le exigieron al jefe del staff que me separara inmediatamente», relató. La decisión se extendió a todos los estadios de Nicaragua.
«Me dijeron que agradeciera que no me sacaron con la Policía. Los motivos son estrictamente de carácter político y la represalia en mi contra es por no apoyar al gobierno sandinista, violando así la Constitución Política de Nicaragua en lo que a los derechos de trabajar se refiere», detalló en su momento a este medio de comunicación.
Ahora fuera de Nicaragua, el opositor asegura que seguirá demandando libertad por sus colegas periodistas presos, así como los opositores acusados por delitos comunes o supuesta traición a la patria. «Por el momento dejaré de hacer periodismo porque necesito establecerme aquí, pero mi lucha por exigir justicia no cesará», concluyó.
