Las autoridades del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) informaron que iniciarán labores de búsqueda para capturar al cocodrilo que atacó a un niño nicaragüense mientras pescaba con su familia en el río Matina de Costa Rica.
«Se estará apegando al artículo 22 de la Ley de vida silvestre. Las personas que se encuentren en este sitio, es muy importante que se traten de alejar para que eviten que el animal al ver la presencia de seres humanos, pues lo que haga es esconderse y esto no ayude al trabajo que están haciendo los funcionarios del SINAC, de poder dar con el animal y generar la captura también», anunció Mauro Vargas Sancho, vocero del instituto costarricense.
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Además, Vargas también detalló que conocen informaciones de personas que quieren matar al animal y recuerda que cometer este hecho también es considerado como un delito por la justicia de Costa Rica. «Se recomienda que ante el avistamiento de un animal de este tipo, la persona, se aleje y evite cualquier tipo de interacción o de capturarlos o hacerles daño para evitar cualquier situación de riesgo», refirió.
La tragedia se registró el domingo, 30 de octubre, cuando la familia decidió visitar el río Matina, ubicado en la ciudad Limón, un lugar rodeado de selvas, playas y abundante vida silvestre. Las autoridades del vecino país decidieron abandonar la búsqueda en el segundo día de rastreo en la zona.
El niño acompañaba a sus padres a pescar en la zona cuando se registró el trágico suceso. La Cruz Roja informó que daba por concluida la búsqueda del menor después de activar a rescatistas en lanchas para intentar dar con el paradero del niño.
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Medios costarricenses afirman que esa decisión la tomaron las demás autoridades debido a la falta de rastros y evidencias, pues todo indica a que el cocodrilo se comió al pequeño. El animal fue localizado a 150 metros de donde se registró el ataque.
La familia del menor llegó hace cuatro años al Caribe costarricense para trabajar en una plantación bananera, pero nunca imagino que vería morir a uno de sus vástagos de esa forma. El reptil tomó en sus fauces a su hijo y ante la mirada atónita de la familia arrastró el cuerpo del menor que estaba en el río. Uno de los testigos afirmó que vio una escena aterradora: «Lo sacudió (al niño) y le arrancó la cabecita. De ahí lo volvió a agarrar y lo aterró (en el río)», contó Wilfredo Centeno a un medio internacional.
