Monseñor Rolando Álvarez, obispo de la diócesis de Matagalpa, dejó en claro que no hay motivos por los cuales el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo le inicie una presunta investigación y le impida salir de la curia episcopal.
«Ayer salió ese comunicado de la Policía en el que, básicamente, hemos leído dos cosas: Primero, que estoy siendo investigado, no sé de qué, pero ellos estarán haciendo sus propias conjeturas. Segundo, que formalmente han dicho que tenemos casa por cárcel», manifestó el obispo .
Noticia relacionada: Ortega ordena “investigación” contra obispo Rolando Álvarez y su equipo y les impone casa por cárcel de facto
Las declaraciones las brindó durante la eucaristía celebrada el mediodía de este sábado, seis de agosto, desde la curia episcopal de Matagalpa donde se encuentra retenido, junto a doce miembros de la comunidad religiosa.
«Estamos reunidos y retenidos, y estamos siempre con la fuerza interior, la paz en el corazón y la alegría que el Resucitado nos da», añadió el también administrador apostólico de Estelí.
El líder religioso invitó a la feligresía a continuar en oración y no temer. «El miedo paraliza, la desesperanza autosepulta y el odio es la muerte del corazón. Al odio se le responde con el amor», les manifestó.
El mensaje llega en la fiesta religiosa de la Transfiguración del Señor, ocasión en la que recordó que «el poder de Dios nunca acabará porque es un poder eterno y Su reino jamás será destruido». «Esta es la proclamación que hacemos como Iglesia en esta fiesta. Los poderes temporales, de este mundo, siempre pasan, todos pasan, solo Dios es eterno», agregó el obispo en su homilía transmitida a través de las redes sociales.
Noticia relacionada: Rosario Murillo amenaza con cárcel a monseñor Álvarez inventando «crímenes de lesa espiritualidad»
«Es la Iglesia, ciertamente, que pasa por la cruz. Estamos conscientes por la gracia del Divino Espíritu que la Iglesia debe pasar, inexorablemente, indispensablemente, por la cruz; pero, también profesamos que esa cruz es la que lleva a la Resurrección», añadió.
Monseñor agradeció la muestras de solidaridad y cercanía expresadas de parte de obispos, religiosos y laicos de Nicaragua y la región, incluido el Consejo Episcopal de Latinoamérica y El Caribe (CELAM). Les pidió continuar orando y seguir atentos a ellos.
La Policía, al servicio de Daniel Ortega y Rosario Murillo, inició un supuesto proceso de «investigación» contra monseñor Rolando Álvarez, después que el prelado saliera a las calles a orar con el Santísimo en manos, ante el asedio policial. La institución represiva lo acusa de incitar el odio para «desestabilizar» el régimen.