La opositora Alianza Cívica emitió un comunicado rechazando lo que considera «una persecución y criminalización» en contra de la iglesia católica de Nicaragua por parte del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo que consolidó su más reciente ataque contra esa institución expulsando a las Hermanas Misioneras de la Caridad.
«Desde la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia expresamos nuestra solidaridad y cercanía con la Iglesia católica de Nicaragua, con su eminencia reverendísima cardenal Leopoldo Brenes Solórzano, con los obispos, clérigos, presbíteros, episcopado y religiosas que en comunión conforman la Iglesia católica; misma que ha acompañado al pueblo en sus momentos más dolorosos y en los momentos en las que la alegría y las esperanzas han estado presentes», expresó la organización independiente.
Noticia relacionada: Cardenal Brenes lamenta ilegalización de las Misioneras de la Caridad: Los más pobres se quedan sin asistencia
Organizaciones defensoras de derechos humanos han señalado que el objetivo de la dictadura con estas acciones es ejercer un control absoluto y silenciar a la sociedad. Ante esto, la Alianza «condena la persecución, el hostigamiento, el asedio y la criminalización contra la iglesia católica en todo el territorio nacional. Lamentamos la decisión de la Asamblea Nacional de cancelar la personalidad jurídica a la fundación de las Hermanas Misioneras de la Caridad de Santa Teresa de Calcuta».
Asimismo, lamentan el cierre del Canal Católico de la Conferencia Episcopal de Nicaragua; Canal 51; y TV Merced, Canal de la Diócesis de Matagalpa que era dirigido por monseñor Rolando Álvarez.
El Ministerio de Gobernación (Migob) sostuvo que las Misioneras de la Caridad no están acreditadas por el Ministerio de Familia para funcionar como guardería, centro de desarrollo infantil y hogar de niñas o asilo de ancianos, ni tienen permiso del Ministerio de Educación para realizar el reforzamiento de aprendizaje.
Noticia relacionada: Ortega priva a los nicaragüenses de «beneficiarse de la caridad y subsistir a tanta pobreza»
La Asociación Misioneras de la Caridad fue creada el 16 de agosto de 1988 durante el primer régimen sandinista (1979-1990), y su apertura se dio luego de una visita a Nicaragua de la Madre Teresa de Calcuta, en la que se reunió con Ortega, quien era también el presidente de entonces.
Hasta el momento, Ortega ha cancelado más de 800 organizaciones sin fines de lucro, utilizando como excusa que estas no cumplieron con los requisitos que a través de las nuevas creadas para reprimir a sus disidentes.