Un tribunal de París rechazó la demanda de más de 1 mil exbananeros nicaragüenses que demandaron a tres de los mayores grupos químicos del mundo por una indemnización que superaba los 800 millones de dólares. Este sería un procedimiento inédito para reclamar una indemnización millonaria por los daños causados por uno de sus pesticidas, el nemagón, a cientos de campesinos.
La razón que este asunto sea abordado por la Justicia francesa es que los tribunales de Estados Unidos se negaron a ejecutar las sentencias que se dictaron en 2002 y 2007 en Nicaragua, y que obligaban a esas tres compañías a compensar a las víctimas de un pesticida comercializado con los nombres de Nemagón y Fumazone.
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Esas sentencias consideraban demostrado que las tres empresas vendieron ese producto en el país centroamericano a pesar de que había sido prohibido en Estados Unidos desde 1977 por los efectos dañinos que causaba en quienes lo utilizaban, en particular para los bananeros.
Entre los efectos estaban cánceres de próstata y de hígado, así como problemas neurológicos que daban lugar a ceguera e infertilidad.
Los jueces estadounidenses no estimaron dignos de confianza los dictámenes de los tribunales nicaragüenses, de los que sospechaban haberse dejado arrastrar por prácticas de corrupción.
Para tratar de conseguir el pago de las indemnizaciones en París amparándose en los bienes de Shell Oil, Dow Chemical y Occidental Chemical, los abogados que defienden los intereses de los campesinos nicaragüenses se basan en el principio jurídico del exequátur.
Se trata de un principio utilizado sobre todo en los casos de divorcio para reconocer una sentencia extranjera.
Se eligió Francia por varias razones. La primera es que desde 2012 cualquier decisión de exequátur es de ejecución inmediata en todos los países de la Unión Europea. Además, el mecanismo de responsabilidad civil en Francia, que deriva del Código Napoleónico, fue transcrito literalmente en el ordenamiento jurídico de Nicaragua.
De esta manera se cierra otro episodio oscuro en la búsqueda de justicia de los afectados por el nemagón que han tocado diversos sistema de justicia en Estados Unidos, Nicaragua y Francia.