En las cárceles del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo hay 13 defensoras de derechos humanos presas que son sometidas a «torturas sistemáticas y aislamiento desde hace más de seis meses», denunció la Iniciativa Mesoamericana de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos (IM-Defensoras).
«En Nicaragua 13 defensoras de derechos humanos pasarán este fin de año privadas de libertad e incomunicadas de sus familias. Cuatro de ellas se encuentra en una situación preocupante viviendo torturas sistemáticas y aislamiento desde hace más de seis meses: Tamara Dávila, Ana Margarita Vijil, Suyen Barahona y Dora María Téllez», dijo Morena Herrera, de la Red Salvadoreña de Defensoras de Derechos Humanos.
Las cuatro presas políticas son parte de la Unión Democrática Renovadora (Unamos), todas llevan recluidas más de seis meses en prisión y el régimen Ortega-Murillo les abrió una causa judicial por supuestamente violar la Ley 1055, Ley de Soberanía, un instrumento jurídico que buscaba inhibir a los opositores para las elecciones presidenciales de noviembre de 2021.
Herrera explicó que a las mujeres les prohíben ver a sus hijos e hijas, las interrogan constantemente, reciben una mala alimentación, les niegan atención médica por enfermedades crónicas, las mantienen aisladas y las someten a alteraciones sensoriales.
Política de terror
La defensora de derechos humanos aseveró que el miedo y el silencio son parte de las consecuencias de la «política de terror» impuesta por la dictadura Daniel Ortega y Rosario Murillo. «Incluye hostigamientos, detenciones, allanamientos, coerción financiera y vigilancia a todo lo que representa una amenaza o un pensamiento crítico sobre su Gobierno, que es un gobierno corrupto, autoritario, neoliberal y misógino», recalca el organismo.
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Entre 2018 y 2021, la IM-Defensoras ha documentado un total de 6,003 agresiones contra defensoras de derechos humanos en Nicaragua, al menos 115 han sufrido detenciones arbitrarias.
«Urge que la comunidad internacional se solidarice con estas 13 defensoras, denuncien lo injusto de su situación y exija la inmediata libertad de las 167 personas que están presas políticas en Nicaragua», concluyó Herrera.