Evelyn Pinto Centeno, de 62 años, fue detenida el pasado seis de noviembre, horas antes de la farsa electoral de la reelección de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Según sus familiares, más de 20 policías al servicio del régimen sandinista realizaron «el operativo» en su casa para detenerla sin orden judicial.
Silvia Nadine Gutiérrez, hija de la prisionera política número 141, y quien actualmente está en el exilio, dijo a Artículo 66 que su progenitora aún no ha podido ser visitada por ningún pariente ni por su esposo. «Mi mamá lleva 19 días detenida, sin saber cómo se encuentra su integridad física», denunció.
Noticia relacionada: Fiscalía orteguista acusa a Samantha Jirón por Ciberdelitos y conspiración
«Sabemos que las condiciones en un distrito de Policía son duras porque son condiciones para estar máximo dos días. No hay condiciones para que un ciudadano esté detenido por más tiempo», refirió la exparlamentaria.
Por su parte, opositores y allegados a la rehén de Ortega afirman que «a través de su vida tanto personal como laboral, Evelyn Pinto ha trabajado por los derechos humanos, en especial por los derechos de la niñez y la adolescencia, los derechos de las mujeres y de los pueblos indígenas».
Además refieren que Pinto es «una adulta mayor» sobreviviente de cáncer; padece de hipertensión e insuficiencia renal crónica, actualmente las autoridades policiales permiten que se le pasen alimentos y medicina.
Silvia Nadine Gutiérrez exige la libertad de su mamá y que se le respete su integridad física. Actualmente, el régimen orteguista tiene 14 mujeres presas políticas en los distintos penales de Nicaragua, a quienes ha señalado de traidores a la patria o les imputa delitos comunes.
Noticia relacionada: Opositora Nidia Barbosa se encuentra hospitalizada luego de ser encarcelada por el régimen de Nicaragua
Las últimas dos mujeres detenidas por la Policía de Daniel Ortega fueron las opositoras Samantha Jirón y Nidia Barbosa, esta última acusada de «conspiración y ciberdelitos».
Para la hija de la detenida, Ortega irá ejerciendo más su fuerza opresora en contra del pueblo nicaragüense. «El gobierno de (Daniel Ortega) está dejando claro que el país va a ser a como él desea, un país sin voces opositoras, un país donde no hay libertad de prensa. Cada vez que Ortega toma más posesión de cada elección va ejerciendo más represión».