Tras las votaciones del siete de noviembre, donde el dictador Daniel Ortega se impuso por cuarto periodo consecutivo, el Observatorio Ciudadano Urnas Abiertas reporta que solo un 18.5 % de los nicaragüenses participó de ese proceso frente a un 81.5 % de abstencionismo.
El coordinador para el Observatorio Electoral Urnas Abiertas, Pedro Salvador Fonseca, dijo que se llegó a concluir, según la información recopilada por la red territorial, que «la cifra de participación en los procesos de votaciones no ascienden el 18.5%, lo que es una cifra histórica para Nicaragua, aunque hay que tener en cuenta que las cifras de abstención han venido aumentando paulatinamente».
También resaltó que los números del Observatorio difieren con los publicados por Consejo Supremo Electoral (CSE), que vio ganar a Ortega con el 75 %, sabiendo que no se permitió observación electoral y se encarceló a siete aspirantes presidenciales, además que la abstención fue mayor que años anteriores. «Hay que tener en cuenta la efectividad de la muestra del Observatorio ha sido del 85.87 %», explicó.
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En referencia al padrón electoral, el Observatorio se basó en el que divulgó el Consejo Supremo Electoral, que es de 4 millones 478 mil 334 de personas habilitadas para votar.
Violencia política durante el proceso de votación
En cuanto a las anomalías durante las votaciones del siete de noviembre en Nicaragua, Urnas Abiertas reportó «violencia política en diferentes centros de votación, en los que se destacan patrullaje policial y parapolicial y presencia de fanáticos orteguistas en las diferentes juntas receptoras de votos.
Según Fonseca, Urnas Abiertas logró identificar estrategias por parte del régimen orteguista para coaccionar a las personas que quisieron ejercer el voto, con el objetivo de favorecer al Frente Sandinista.
Entre otras incidencias se destacan que no se respetó el silencio electoral por parte del FSLN, quienes más bien aprovecharon para hacer visitas casa a casa para manipular el voto ejecutando un plan de movilización de votantes, hostigamiento y coacción.
El Observatorio también reporta situaciones de violencia en 57 municipios, 13 departamentos y las dos regiones autónomas de Nicaragua. «Los únicos departamentos que no se recibieron reportes de violencia política fueron Carazo y Río San Juan», detallaron.
Acompañamiento electoral en tiempos de dictadura
Para lograr el objetivo de Observación, Urnas Abiertas contó con la colaboración de 1,450 personas en los territorios durante el día de la votación, «afortunadamente pudimos concluirlo positivamente, aunque claramente los retos han sido muchísimos», destacó el coordinador del Observatorio.
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Destacan que para lograr el objetivo tuvieron presencia en cada centro de votación durante seis horas, desde las siete de la mañana hasta las seis de la tarde. Horario de observación: 07: AM – 900 AM, de 11:00 AM- 1:00 PM, de 4:00 AM -6:00 PM
«Naturalmente para principios de este año, las expectativas de un proceso democrático eran muy bajas. Hay que tener en cuenta que, según el análisis político era difícil proyectar un proceso libre, transparente y democrático, sin embargo se consideró la creación de una matriz independiente ciudadana y que tuviese como fin tres grandes perspectivas que son administración electoral, derechos humanos y violencia política, todo se logró monitorear», refirió Pedro Fonseca.